Así lo aseguró Pajín en rueda de prensa tras la reunión de la Permanente de la dirección federal del PSOE, después de que los sindicatos desvelaran su propuesta para esos servicios mínimos.

A pesar de las reivindicaciones de los sindicatos, Pajín se mostró convencida de que habrá acuerdo, sobre la base de que la huelga general es “legítima”, pero no puede impedir, argumentó, el acceso de los ciudadanos a los servicios básicos.

En todo caso, aseguró que el Gobierno se encargará de mantener esos servicios mínimos, igual que tras la huelga seguirá practicando el diálogo porque lo considera “el mejor instrumento” para avanzar hacia el logro de los principales objetivos, la salida de la crisis y la creación de empleo.

La “falta de coincidencia” sobre el diagnóstico de la situación y las posibles soluciones, aseguró Pajín, “no puede convertirse en ningún caso en falta de respeto o de reconocimiento” hacia la labor de los sindicatos, y por ello aseguró que no serán los socialistas quienes los critiquen.

En ese sentido, acusó abiertamente al PP de buscar la “confrontación” al respaldar iniciativas como la de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, de recortar puestos de liberados sindicales.

Con ello, demuestra, en opinión del PSOE, que en el fondo le molestan los ciudadanos “comprometidos” con los derechos de los trabajadores y con quienes denuncian “la desidia” de la gestión de Aguirre y el deterioro “insostenible” de los servicios públicos en la Comunidad de Madrid, ante lo cual el PP no propone nada que pueda ser provechoso para los ciudadanos más allá de discursos de “confrontación”.