La capa de ozono se recupera

- Los primeros indicios apuntan a un agujero relativamente más pequeño para este año

MADRID
SERVIMEDIA

Las primeras observaciones realizadas en 2010 sobre el agujero de la capa de ozono muestran una extensión menor que la de los últimos años, según informó la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) ante el Día Internacional para su conservación.

Con motivo de esta fecha, que se celebra cada 16 de septiembre, la Aemet informó de que los primeros indicios "parecen apuntar a un agujero relativamente más pequeño para este año 2010".

En 2009, el agujero de ozono tuvo una extensión media de 21,7 millones de kilómetros cuadrados, y su extensión máxima ocurrió el 17 de septiembre, con 24,1 millones de kilómetros cuadrados, algo menor que la extensión de América del norte.

Estos datos muestran una disminución de la superficie de aproximadamente tres millones de kilómetros cuadrados con respecto al año 2008.

En cuanto al agujero de ozono para 2010, las primeras observaciones muestran una extensión menor que la de los últimos años, aunque el inicio en la destrucción varía considerablemente de un año a otro dependiendo de la posición del vórtice polar, este año más concéntrico y menos alargado que el año pasado, y de la incidencia sobre este de los primeros rayos solares después del invierno austral.

A la espera del comienzo de la época de mayor intensidad en la destrucción de ozono, la Aemet cree que "aún es pronto para poder determinar la extensión y el grado de destrucción". Esto dependerá en gran medida de las condiciones meteorológicas de la zona durante los próximos meses.

No obstante, sí parecen existir "ciertos indicios" que apuntan en el sentido de un agujero de ozono "relativamente más pequeño" para 2010.

El Día Internacional para la preservación de la capa de Ozono conmemora la firma, el 16 de septiembre de 1987, del Protocolo de Montreal, que fue proclamado como tal por la Asamblea General de las Naciones Unidas en 1994.

El tema elegido para este año, "Protección de la capa de Ozono: la gobernanza y el cumplimiento al más alto nivel", pretende reconocer dicho protocolo como el acuerdo multilateral relativo al medio ambiente más eficaz aplicado hasta la fecha.

Tras el descubrimiento del agujero de ozono, los gobiernos reconocieron la necesidad de acordar una serie de medidas para reducir la producción y el consumo de determinadas sustancias destructoras de ozono, principalmente las sustancias conocidas como CFCs y halones.

Según la Aemet, los datos de estos últimos años reflejan que el Protocolo de Montreal "está funcionando", en cuanto se ha conseguido detener la tendencia negativa observada durante los años ochenta y noventa, manteniéndose estable durante estos últimos años tanto la extensión del agujero como los niveles de éste.

LENTA RECUPERACIÓN

Sin embargo, su recuperación se prevé que sea muy lenta, debida al largo tiempo de residencia de los compuestos antropogénicos causantes de su destrucción. Así, se estima que algunas de estas sustancias ya emitidas podrían permanecer activas destruyendo ozono hasta mediados de este siglo.

Los últimos informes estiman que habrá que esperar hasta el 2050 para volver a los valores anteriores a los años 80, época a partir de la que se tiene constancia de la destrucción de ozono, retrasándose hasta 2060-2075 para el caso de la región antártica.

(SERVIMEDIA)
15 Sep 2010
LLM/gja