El objetivo de este plan de actuación, puesto en marcha por el Canal de Isabel II en 2004, es evitar que se lleven a cabo acometidas ilegales en la red de abastecimiento de agua y consumos sin contrato, infracciones tipificadas en el artículo 255 del Código Penal como defraudación de fluidos.

En lo que va de año, el Canal de Isabel II ha realizado alrededor de 3.500 actuaciones en relación con la posible existencia de situaciones susceptibles de conllevar algún tipo de ilegalidad relacionada con el consumo o uso fraudulento y descontrolado del agua.

De este modo, se han interpuesto denuncias ante la Autoridad Judicial por defraudación por un volumen superior a los 500.000 metros cúbicos de agua y se han abierto 1.600 expedientes sancionadores tramitados por infracciones al Reglamento para el Servicio y Distribución de Aguas del Canal Isabel II.

En los últimos cinco años, la entidad ha desarrollado más de 10.000 inspecciones relacionadas con fraudes de agua que han sido resueltas mediante cortes de suministro, condena de acometidas o tramitación de contratos de alta en el suministro de agua. Además, se ha denunciado ante la Justicia un total de 400 fraudes por los que se reclama una cantidad de más de 8,5 millones de euros.

El Canal de Isabel II puso en marcha este Plan para evitar que se malgaste el agua y que haya personas o entidades que no pagan el agua consumida. Para ello, la entidad, en colaboración con el Seprona de la Guardia Civil, está llevando a cabo inspecciones en las conducciones que tiene repartidas por toda la Comunidad de Madrid.