Madrid. 52 millones para que más de 110.000 trabajadores madrileños mejoren su formación
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El Consejo de Gobierno aprobó hoy un gasto de 52.624.817 euros para financiar la convocatoria de subvenciones destinadas a planes de formación dirigidos prioritariamente a trabajadores ocupados en 2010, explicó su portavoz, Ignacio González.
Dijo que este importe permitirá conceder ayudas a 260 entidades para que desarrollen acciones formativas de las que se beneficiarán 112.191 madrileños y explicó que el objetivo de este programa de ayudas es hacer posible que los trabajadores reciban una formación ajustada a las necesidades reales del mercado de trabajo, que les permita lograr su promoción profesional, su desarrollo personal y les facilite el acceso al empleo.
Los planes de formación subvencionados son ejecutados por organizaciones empresariales y sindicales, entidades de la economía social y asociaciones de trabajadores autónomos, que reciben del
Gobierno regional los fondos necesarios para ponerlos en marcha.
En la convocatoria 2010 se establece como novedad que, las organizaciones sindicales y empresariales no tendrán que tener la condición de más representativas en la Comunidad de Madrid o en el ámbito de actividad correspondiente, para poder solicitar ayuda, sino que bastará con que sean representativas.
Tienen preferencia de acceso a estas acciones formativas los trabajadores ocupados, aunque también podrán participar en las mismas los trabajadores inscritos como desempleados en las oficinas de empleo de la Comunidad de Madrid (en un porcentaje como máximo del 40%) y los cuidadores no profesionales de personas en situación de dependencia.
Además, se prestará especial atención a la participación en estos cursos de mujeres, personas con discapacidad, mayores de 45 años e inmigrantes.
Las subvenciones aprobadas hoy se articulan a través de cuatro tipos de planes formativos: intersectoriales de carácter general (dirigidos a trabajadores de diversos sectores que reciben una formación común a los mismos, por ejemplo, en materia de ofimática), sectoriales para un sector productivo concreto (por ejemplo, formación en materia de chapa para trabajadores de talleres de reparación de vehículos), para trabajadores de cooperativas, sociedades laborales y entidades de economía social y, por último, planes sectoriales e intersectoriales dirigidos a trabajadores autónomos.
(SERVIMEDIA)
02 Sep 2010
SMO/lmb