Incendios. La Xunta da por controlado el incendio de Laza, el más importante del verano

SANTIAGO DE COMPOSTELA
SERVIMEDIA

La Consejería gallega de Medio Rural ha dado hoy por oficialmente controlados los incendios forestales registrados en los municipios ourensanos de Laza (que afectó a 1.715 hectáreas), Castrelo do Val y Chandrexa de Queixa, que entre los tres suman una superficie quemada de 2.258 hectáreas. Por otro lado, informan de que los producidos en Vilariño de Conso, Manzaneda e O Bolo, también en la provincia de Ourense, están extinguidos.

El fuego de Laza, el mayor registrado en lo que va de verano en la comunidad gallega y en toda España, se inició el pasado domingo sobre las 16 horas y se dio por controlado a las nueve de esta mañana. Según las primeras estimaciones, la superficie afectada es de 1.715 hectáreas, de las cuales 1.691 son de monte raso y 24 de arbolado.

En los trabajos de extinción participaron cinco técnicos, 12 agentes forestales, 37 brigadas (compuestas por entre cinco y siete personas), 15 motobombas, tres palas, 16 helicópteros, 14 aviones y cuatro pelotones de la Unidad Militar de Emergencias (UME), que son un total de 120 efectivos.

Continúan trabajando en el lugar un agente, dos brigadas, una pala, dos pelotones de la UME y un helicóptero.

Por lo que respecta al incendio registrado en la Parada da Serra (Ourense), entre los ayuntamientos de A Gudiña y Castrelo de Val, el fuego quedó controlado hoy. Comenzó a las 21.35 horas del martes, 31 de agosto y lleva afectadas a unas 150 hectáreas. Para apagarlo, trabajaron sobre el terreno 12 agentes forestales, 19 brigadas, 11 motobombas, una pala y cinco helicópteros.

Otro foco que quedó controlado hoy es el que se inició el lunes en la parroquia de Requeixo, en el ayuntamiento de Chandrexa de Queixa (Ourense). La superficie afectada, según los datos provisionales facilitados por la Consejería, es de 393 hectáreas.

TRES INCENDIOS EXTINGUIDOS

La Consejería de Medio Rural informó también de la extinción de tres fuegos. El primero de ellos, en la parroquia de San Cristovo del municipio de Vilariño de Conso (Ourense), quedó extinguido ayer por la tarde y quemó 213 hectáreas de monte raso. Un técnico, siete agentes, 23 brigadas, nueve motobombas, dos palas, nueve helicópteros y cinco aviones trabajaron para su extinción.

Otro incendio que quedó extinguido ayer fue el de la parroquia de Cernado, en Manzaneda (Ourense), que afectó a 90 hectáreas.

Finalmente, también se logró apagar ayer el fuego de la parroquia de San Martiño, en O Bolo, también en Ourense, que quemó 28 hectáreas, una de ellas de arbolado.

(SERVIMEDIA)
02 Sep 2010
MAG/man