Tras el hallazgo por parte de un agente medioambiental, la Junta dio parte a la Guardia Civil y al juzgado de Ciudad Rodrigo, que ya instruyen las diligencias correspondientes.

El fallecido es J.V., un vecino de Agallas de más de 80 años, cuyo hijo salió anoche a ayudar a las brigadas forestales en las tareas de extinción.

Según explicó el joven, al salir de casa en dirección a la zona afectada por el fuego, su padre estaba cenando. Cuando regresó, y creyendo que el anciano se había ido a dormir a otra vivienda, se fue directamente a la cama.

Las alarmas saltaron a primera hora de esta mañana al comprobar que el hombre no había dormido en su casa. Durante los trabajos de supervisión de la zona quemada, se produjo el hallazgo del cadáver.

Dos agentes medioambientales, dos cuadrillas de tierra, un bulldozer, tres autobombas y una dotación de bomberos de la Diputación de Salamanca se unieron para combatir las llamas, que calcinaron 16,5 hectáreas pobladas de matorrales y escobas, arbustos de hoja perenne de hasta tres metros de alto.

Los primeros indicios confirman que el fuego se produjo de forma intencionada.