Los grupos parlamentarios mostraron su rechazo a los vetos, aunque PNV, PP y CiU se mostraron críticos con la propuesta de reforma abogaron por tratar de mejorarla a través de las enmiendas parciales presentadas.

En total, los grupos han preparado 289 enmiendas parciales al texto, que ahora pasan a debatirse.

La portavoz del Grupo Socialista en el Senado, Carmela Silva, mostró su satisfacción por el rechazo de los vetos, algo que aseguró "valoramos positivamente", ya que permitirá introducir enmiendas.

"Vamos a poder ser partícipes activos de una reforma laboral que es necesaria para la generación de empleo, evitar que los despidos sea la única respuesta en situaciones de crisis, promover que haya más contratación y que los servicios de colocación sean más eficaces", aseguró.

En declaraciones a los periodistas, Silva apuntó además que su grupo va a votar en contra de las propuestas de CiU y PP para que los autónomos tengan derecho a una ayuda no contributiva cuando se le termine la prestación por cese de actividad.

La senadora socialista dijo que lo hacen por "rigurosidad, seriedad y responsabilidad, porque no parece sensato que tengan derechos por encima del resto de los trabajadores".