Fernández Díaz explicó que no sólo ha presentado la denuncia para que se prohiba el acto, sino también "para que se depuren las responsabilidades penales pertinentes respecto a aquellos organizadores de este acto", con el que se pretende amparar a los asesinos del socialista Ernest Lluc y un guardia urbano”.

El líder popular aseguró que “organizar un acto-homenaje a etarras es una auténtica vergüenza democrática, un acto de indignidad, que la ciudad no puede permitir”.