El portavoz de la iniciativa, José Luis Martínez, habló de “lucha” y de “unión” por parte de los pueblos europeos para “acabar con los especuladores financieros, que son los que se están lucrando con todo esto”.

Martínez expresó su satisfacción por haber fomentado la iniciativa y fue cauto al hablar de la marcha, ya que es “realista” y sabe que “muy pocos serán los que aguanten toda la travesía”, pero de lo que sí está seguro es de que “va a ser una marcha simbólica y que represente a los trabajadores de toda Europa en la lucha por sus derechos”.

Maribel Martínez, hermana de José Luis, se mostró muy crítica con la política que se está llevando a cabo por parte de la Administración central y autonómica, porque “no se está escuchando a los aragoneses ni a los trabajadores en general, y, por tanto, esta política no es social”.

Además, se dirigió al Gobierno de Aragón diciendo que “es el Gobierno de los aragoneses y no de unos pocos, por lo que tiene que tratar de ayudar a todos”.

Una vez en la capital belga el 27 de septiembre, algunos acompañantes regresarán a España para organizar la huelga general prevista para dos días más tarde, el 29 de septiembre. Otros, en cambio, seguirán en Bruselas para reunirse el mismo 29 de septiembre, en el día de lucha europea, con otros colectivos de países como Alemania u Holanda.

Tras partir de Zaragoza, la marcha avanzará por Montañana y Zuera en lo que será la primera etapa. También pasará por Huesca. Ya desde el túnel de Viella cruzarán al país vecino para avanzar por una antigua nacional francesa que cruza el país en diagonal. En territorio galo visitarán ciudades como Orleáns, París y Compiègne, y pasarán a Bélgica por Mons.