Madrid. El Hospital de La Princesa implanta un programa de cuidados integrales para pacientes renales y cardiacos

MADRID
SERVIMEDIA

El Hospital Universitario de La Princesa acaba de implantar un nuevo programa para pacientes con patología renal y cardiaca, que beneficiará a unas 3.650 personas y cuyo objetivo es ofrecer una atención integral desde el punto de vista de los cuidados de enfermería, según informó la Comunidad de Madrid.

El cuidado del paciente hospitalizado con problemas renales requiere de unos profesionales de enfermería formados tanto en cuidados clínicos como en conocimiento y manejo de las distintas técnicas de depuración extrarrenal, como la hemodiálisis o la diálisis peritoneal.

El servicio de Nefrología atiende pacientes en dos áreas asistenciales diferenciadas, hospitalización y área de tratamiento ambulatorio. El área de hospitalización consta de una zona de ingreso con 12 camas (el total de ingresos anuales es de 650 pacientes) y Unidad de Diálisis, donde se realizan diferentes terapias de reemplazo renal en procesos agudos (con 6 puestos de dotación).

En el área de tratamiento ambulatorio, unos 52 pacientes con enfermedad renal crónica en programa de diálisis reciben las terapias de sustitución (diálisis peritoneal, hemodiálisis diaria o convencional y hemodiálisis domiciliaria).

La consulta de enfermería de enfermedad renal crónica avanzada también está integrada en esta unidad con el fin de que los pacientes puedan recibir toda la información y educación necesaria para que elijan la modalidad de tratamiento que mejor se adapte a sus circunstancias personales.

La cualificación y preparación del personal de enfermería del servicio está siendo progresiva y continua, y al final de este año habrá recibido formación suficiente en cada una de las áreas, para asumir integralmente los diferentes cuidados que necesita el paciente.

La instrucción del paciente que va a comenzar diálisis peritoneal o hemodiálisis domiciliaria, la valoración de su estado nutricional o la disminución de la tasa de infección en los pacientes portadores de catéter son sólo algunos de los conocimientos en los que ha profundizado el personal de enfermería a través de los programas de formación.

En cuanto a los pacientes con enfermedades cardiacas, a partir de ahora se van a beneficiar de condiciones similares a las de los pacientes con problemas renales. Las tres unidades en las que se divide el servicio de Cardiología y por las que pasan unos 3.000 pacientes al año, hospitalización, cuidados intermedios cardiacos (destinada a aquellos pacientes que acaban de salir de la UCI y necesitan un nivel de vigilancia mayor) y hemodinámica (donde se realizan procedimientos como coronariografías diagnósticas o terapéuticas o implantación de marcapasos), van a estar bajo una única supervisión, que garantizará la coordinación de los cuidados en cualquiera de ellas.

El personal de enfermería que atiende estas tres unidades está recibiendo también la formación necesaria para poder desempeñar su trabajo de atención integral a los pacientes cardiacos.

(SERVIMEDIA)
14 Ago 2010
CAA