Deporte

900.000 mujeres practican deporte federado frente a casi tres millones de hombres, y sigue existiendo un techo de cristal en él

MADRID
SERVIMEDIA

En 2020, 901.000 mujeres practicaban deporte federado, frente a casi tres millones de hombres. Asimismo, ellas siguen encontrándose con barreras en la igualdad de sus salarios con respecto a los de sus compañeros, se les dificulta el acceso a puestos directivos en los clubes, y su visibilidad en redes sociales y medios de comunicación es mucho menor.

Así lo pone de manifiesto el informe ‘Un 2022 de oro para las mujeres deportistas: de Alice Coachman a Alexia Putellas’ que, realizado por OBS Business School y dirigido por la antropóloga y profesora de la escuela Ruth Abad, reflexiona sobre la presencia de la mujer en el ámbito deportivo en España, en el deporte federado, así como sobre la brecha de género estructural que afecta tanto a la práctica deportiva de base como a la profesional.

Aborda también la percepción de la sociedad española del deporte femenino, y muestra el caso del fútbol, cuya tendencia mediática y económica en el momento actual es la punta de una lanza que abre la puerta al resto de las mujeres deportistas, ya sean profesionales o aficionadas.

Aunque el informe constata que las mujeres participan ampliamente en el deporte, demuestra también que la desigualdad de género en este campo es estructural, ya que se topan con un techo de cristal a la hora de acceder a los puestos de dirección deportivos, en la igualdad de los salarios de las jugadoras profesionales y en la visibilidad en los medios de comunicación de masas y en las redes sociales.

“El mundo del deporte debe situar a las mujeres en condiciones de igualdad desde la práctica de deportes base hasta la profesionalización de las jugadoras, entrenadoras, técnicas y directivas”, afirmó Abad.

En este sentido, el informe destaca que, desde que Alice Coachman consiguiera la medalla de oro en salto olímpico en 1948, son muchas las mujeres pioneras que han derribado barreras en un mundo masculinizado como es el deporte de élite. “Hoy cada vez más deportistas son reclamadas para hacer de embajadoras de grandes marcas (Simone Biles, Serena Williams…) que las convierten, tanto a ellas como a ellos, en un producto de consumo para la afición, un artefacto cultural. Todo ello apoyado, como no podría ser de otra manera, por las redes sociales, con las que las deportistas profesionales ahora poseen el control de su marca personal y pueden cultivar su propia audiencia”, reza.

El informe también hace hincapié en la presencia de las mujeres en la organización deportiva. En este sentido, constata que la incorporación de la igualdad de género en la cultura organizacional de los clubes deportivos implica el reconocimiento de la capacidad de las jugadoras, entrenadoras, técnicas y directivas como sujetos de derechos. Así, ahonda en el reciente nombramiento de Alexia Putellas como embajadora para la igualdad en el deporte, pues asegura que supone un paso más en la apuesta por el deporte femenino en general y el fútbol femenino en particular.

Por su parte, recuerda que el 17 de diciembre pasado el Consejo de Ministros aprobó el anteproyecto de la nueva Ley del Deporte, que establece medidas para que las entidades públicas y privadas equilibren la presencia de mujeres en sus órganos directivos; que se dé visibilidad a los eventos deportivos femeninos; y que se reduzca la merma de derechos de las mujeres al quedar embarazadas, manteniendo el voto en las asambleas generales y conservando sus derechos como deportistas de alto nivel una vez transcurrido este periodo.

Según indica el informe, el número de mujeres deportistas federadas va en aumento, pero se mantiene la brecha con respecto al número de hombres (en 2020 eran 901.000 mujeres frente a 2.941.000 hombres). Los deportes con más federadas son el baloncesto, que ha pasado de 122.083 mujeres en 2008 a 130.539 en 2020; la montaña y escalada, con 33.371 mujeres en 2008 y 85.170 en 2020; el golf, con un descenso desde las 103.554 licencias a mujeres en 2008 a 75.447 en 2020; y el fútbol, que ha desbancado al voleibol de los primeros puestos con 77.461 licencias en 2020 frente a las 29.528 de 2008, todavía muy lejos de las cifras de los hombres pero en constante aumento.

Por su parte, y a nivel territorial, Andalucía y Madrid tienen el mayor número de licencias profesionales femeninas (157 y 126 respectivamente), mientras que la federación territorial catalana es la que aporta el mayor número de licencias de jugadoras aficionadas (2.334).

16 son los equipos que compiten en la Primera División Femenina de Fútbol, y se han previsto en la actual temporada 240 partidos frente a los 848 masculinos.

En cuanto a la asistencia de espectadores a los partidos de fútbol femeninos, destaca que últimamente se registran cifras récord, por ejemplo, en el encuentro entre el Atlético de Madrid y el Fútbol Club Barcelona disputado en el estadio Wanda Metropolitano, al que asistieron más de 60.000 espectadores.

Así, el informe concluye que “2022 será recordado como el año dorado para las futbolistas profesionales españolas”, que experimentarán una mejora en sus condiciones laborales y en el “reconocimiento mediático y social que merecen”.

“En un sector que mueve miles de millones de euros, los nuevos nichos de mercado como el fútbol femenino profesional se sitúan a nivel nacional como una oportunidad para solventar los escollos de la pandemia. Sin embargo, a pesar de su papel protagónico, las jugadoras profesionales de fútbol han tenido que luchar por sus derechos laborales, pioneras en este sentido, para el resto de las mujeres deportistas del ámbito nacional e internacional”, concluyó Abad.

VISIBILIDAD

El informe también trata la visibilidad que los deportes femeninos y las que los practican tienen en los medios de comunicación o las redes sociales. Así, y aunque lo hacen muy por debajo de las cifras de los hombres, las deportistas ya empiezan a aparecer en las conversaciones de las redes sociales, pero estas menciones suelen abordar temas como el patrocinio de grandes marcas al deporte femenino y no tanto a los resultados y méritos de las deportistas.

En este sentido, el documento destaca la competencia de la jugadora Alexia Putellas, “que en 2021 tuvo sin duda su mejor año en lo que a reconocimiento profesional y social se refiere al ser premiada como la mejor jugadora femenina de la FIFA y Balón de Oro”, y destaca también a la directora técnica del Chelsea Football Club Women, Emma Hayes, ganadora del Premio The Best de la FIFA a la mejor entrenadora de fútbol femenino 2021.

(SERVIMEDIA)
04 Mar 2022
SDM/clc