Los peces muertos fueron encontrados por este servicio de la Benemérita en una presa de Marmorlejo (Jaén), concretamente en la desembocadura del río Jándula con el Gaudalquivir.

Según las primeras estimaciones de la Agencia del Medio Ambiente (AMA), la causa de este desastre ecológico es la falta de oxígeno para los peces por el escaso caudal de los ríos de la zona.

Las mismas fuentes aseguran que la escasez de agua hace que las algas y otrasespecies absorban gran cantidad de oxígeno, por lo que los peces encuentran grandes dificultades para subsistir en su medio natural.

De momento, se descarta que la causa de la muerte de estos peces se debe a algún vertido tóxico. Sin embargo, no ocurrío así con la muerte recientemente de peces en el término municipal de Baeza, concretamente en el Puente del Obispo, donde la muerte de los peces se debe al alpechín, líquido sobrante de la fabricación de aceite.

El alpechín es una sustancia de alto oder contaminante y la patrulla de la Agencia del Medio Ambiente y del Seprona pudieron comprobar que en el momento del suceso las aguas bajaban totalmente negras en esa zona.

Los técnicos del AMA consultados por Servimedia advirtieron que muchos más peces podrían morir en la zona de Marmolejo por la falta de agua.

La semana pasada también murieron otros tres mil barbos y carpas cerca da la localidad de Mejíbar, también por falta de oxígeno.

La asociaciones ecologistas han mostrado su preocuación por estos hechos. Miembros de la asociación Natura anunciaron que iniciarán una campaña para solucionar este problema.