Rodríguez Zapatero compareció en rueda de prensa tras el Consejo de Ministros para hacer balance de su gestión en los últimos seis meses, cumpliendo así su compromiso de explicarse públicamente al final de cada periodo de sesiones parlamentario, en este caso tras un semestre “con serias dificultades pero de una intensa acción de Gobierno”.

Su conclusión es que los objetivos con los que comenzó el año “se van cumpliendo” y para contribuir a ello los Presupuestos Generales del Estado para 2011 serán “restrictivos y austeros”, con una reducción media del gasto en cada departamento del 15%.

La guía de Rodríguez Zapatero para afrontar las dificultades es “austeridad, reformas y cohesión social”, una fórmula que reiteró en varias ocasiones y en la que situó además la posición del PSOE en el espectro ideológico ante próximas convocatorias electorales.

El presidente reconoció que sacar adelante cada reforma importante “ha costado trabajo”, por lo que agradeció expresamente la posición de quienes han permitido aprobarlas, con su respaldo o su abstención, “porque han hecho un buen servicio al país y al futuro de la economía española”.

“Me gustaría que fueran más grupos”, admitió, pero entiende que no resulta fácil para otros partidos respaldar al Gobierno en medidas que son “una obligación” para quien gestiona las riendas del país pero que son claramente “impopulares”.

El presidente evitó con una sonrisa caer en la tentación, “aunque la tenga”, de decir que CiU y PNV han demostrado en ciertas ocasiones más responsabilidad que el PP, y se limitó a reiterar la idea de que respaldar medidas difíciles es algo que la sociedad “agradecerá”, también al propio partido que respalda al Ejecutivo.

Sobre esa misma premisa el presidente aseguró que trabajará “con calma” para sacar adelante los Presupuestos del próximo año, consciente de que será complicado pero también confiando en que “existen condiciones para la actitud responsable” de los diputados.

Aunque con el PNV hay “buena disposición” al diálogo, el presidente precisó que la tarea de acercamiento debe ejercerse día a día. Para el Gobierno el terreno del acuerdo está en los Presupuestos y en las reformas pendientes, y si hay otros “ámbitos” planteados por esa formación serán “responsabilidad del partido”.

Rodríguez Zapatero siguió sin desvelar si será o no candidato del PSOE a la Presidencia del Gobierno en las próximas elecciones generales, ni siquiera el momento en el que prevé despejar esa incógnita, o los factores de los que depende su decisión.