En Irún, la Polícía Autónoma Vasca detuvo en la tarde de ayer viernes a un varón de 25 años de edad acusado de tráfico de drogas. El arrestado había salido corriendo al observar el vehículo oficial de la Ertzaintza y en la huida abandonó 11 planchas de hachís que portaba en una bolsa, según informó la Policía Vasca.

Los hechos ocurrieron sobre las cuatro y media de la tarde de ayer en la calle Estación de Irun. Al paso de una patrulla de la Ertzaintza un varón salió corriendo por lo que los agentes decidieron interceptarle. Al bajar unas escaleras el hombre tropezó y cayó al suelo perdiendo en el camino una bolsa de plástico que llevaba en la mano.

Los agentes le dieron alcance metros después, en la calle Rentería y tras comprobar que lo que portaba en la bolsa eran once planchas de hachís procedieron a su detención. El arrestado, un varón de 25 años de edad, fue acusado de un delito de tráfico de drogas.

Por otra parte, agentes de la Ertzaintza detuvieron ayer en Vitoria a un varón de 36 años acusado de tráfico de drogas. El arrestado, gerente de un bar de la capital alavesa, escondía en el establecimiento la droga, hachís y cocaína, que los agentes encontraron escondida en una máquina.

Una patrulla, que realizaba labores de vigilancia en torno a un establecimiento de la capital alavesa, observó que el dueño se disponía a abrir el local. Los agentes sospechaban que en el interior se pudiera estar traficando con droga por lo que entraron y después de identificarse como agentes de la policía vasca, localizaron tras la barra del bar una máquina de hacer hielo que estaba siendo manipulada por el camarero.

En el interior del mecanismo, encontraron escondida una bolsita de plástico con un polvo blanco así como varios trozos de otra sustancia de color marrón.

Ante la sospecha de que pudiera tratarse de droga, los agentes procedieron a la detención del dueño y camarero del local, un hombre de 36 años que fue trasladado a dependencias policiales. Una vez en comisaría los agentes realizaron el análisis y comprobaban que se trataba de 12 gramos de cocaína y 300 gramos de hachís.