Según informa la Ertzaintza en una nota de prensa, los hechos ocurrieron a la una de la madrugada, cuando un testigo alertó a la citada policía autonómica de que había estado a punto de ser arrollado por un hombre que hacía trompos con el coche en el mencionado aparcamiento.

Una patrulla policial se acercó al lugar y comprobó cómo un varón conducía de forma temeraria por el aparcamiento. Tras identificarle y comprobar que carecía de permiso de conducción, los agentes le detuvieron.

El vehículo fue entregado a su propietario, quien había dejado las llaves al detenido para que durmiera en su interior. El arrestado será puesto a disposición judicial.