No obstante, la mitad de los empleados por cuenta propia que paga el mínimo al Régimen Especial de Trabajadores Autónomos (RETA) de la Seguridad Social desconoce que pueda cotizar más.

Esta situación tiene dos consecuencias inmediatas, por un lado que la cotización media al RETA es muy inferior a la del régimen general (836,49 euros frente a 1.359,25 euros, un 61,54%), y, por otro, que las pensiones son también más bajas (446,72 euros de los autónomos por 733,63 euros del general, un 60,9%).

Además, un autónomo que tiene contratado a algún asalariado cotiza el doble por su empleado que por él mismo, dándose después la paradoja de que su pensión es muy inferior a la de su trabajador, afirma la Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónómos (ATA).

A estos datos hay que añadir el hecho de que más del 60% de los autónomos coticen por debajo de sus ingresos, lo que el Ministerio achaca a la falta de información en materia de Seguridad Social que tiene el colectivo.