En una rueda de prensa en la Cámara Baja tras la votación de las propuestas, y a pregunta de los periodistas, Alonso explicó que "el PNV pidió una serie de cosas", y, aunque los socialistas estaban dispuestos a hablar de transferencias, "simplemente" no lograron llegar a un acuerdo.

"No pasa nada, seguiremos trabajando", añadió, precisando que "no hay mayor misterio" en la falta de apoyo de un grupo, el nacionalista, que se especulaba podría ayudar al Gobierno a sacar adelante los presupuestos.

A este respecto, Alonso matizó que el techo de gasto, con el que anunció que España cumple ya sus compromisos de ajuste del déficit, no tiene nada que ver con los presupuestos, recordando que el año pasado el PNV votó en contra del primero y apoyó los segundos. Este año el PNV se abstuvo, lo que él entendió como una especie de apoyo.

"El desacuerdo de hoy lo vamos a normalizar porque entra dentro de lo previsible", zanjó, restringiendo el desencuentro a una falta de acuerdo con la propuesta del PSOE sobre transferencias.