En declaraciones a la Ser recogidas por Servimedia, Cabo afirmó que "estamos bastante cansados porque en los últimos meses las condiciones laborales se han degradado, porque nos están sometiendo a mucha presión y hay gente que está teniendo problemas".

Estas manifestaciones del portavoz del sindicato de los controladores llegan en una jornada en que 18 de los 53 profesionales que debían trabajar en el centro de control aéreo de Barcelona no lo han hecho y en que los retrasos en todos los aeropuertos mediterráneos han sido generalizados.

Pese a las numerosas bajas de última hora, Cabo considera que lo ocurrido en El Prat es el fruto "de un problema de mala gestión por parte de Aena, que sabe cuántas bajas hay y tiene que corregirlo y programar de forma adecuada para responder al tráfico previsto".

Sobre la investigación anunciada por el ministro de Fomento, José Blanco, Cabo afirmó que "en vez de demonizar a un colectivo, le agradecemos que investigue el porqué de las bajas, ya que no responden a consignas sindicales, sino que son el resultado de las medidas de presión como consecuencia de una ley que no se está aplicando bien".

AENA SIGUE INVESTIGANDO

Por su parte, un portavoz de Aena denunció que "se trata de bajas deliberadas para presionar", por lo que explicó que la Inspección de la Seguridad Social continúa con la investigación de cada una de estas bajas, aunque todavía no se han abierto expedientes.

De hecho, Aena y USCA mantienen durante estos días reuniones continuas para negociar el convenio de estos profesionales y adaptarlo a la nueva normativa recogida en la ley de navegación aérea.

Por otro lado, el portavoz aseguró que Aena ha puesto en marcha "todos los instrumentos para garantizar la continuidad del tráfico" y lamentó que se estén produciendo estos hechos en estos momentos, porque "perjudican sobre todo al pasajero, al sector turístico y a las compañías aéreas cuando estamos en temporada alta".

AEROLÍNEAS

Entre los afectados, fuentes de las compañías aéreas consultadas por Servimedia reprocharon a este colectivo que "ahora, cuando hacen menos horas que el año pasado, les pasa de todo, cuando el año pasado, cuando las cobraban a precio de oro, no les dolía nada".

Por ello, consideran que "están absolutamente fuera de lugar estas bajas", que creen "indiscriminadas" y que no tienen ninguna causa que las justifique.

"Se trata de una huelga de celo para presionar a Aena y mantener siempre como rehenes a los pasajeros en los días de más intensidad de vuelo", continuaron estas fuentes, que pidieron la "intervención firme por parte de la Administración".

CONSUMIDORES

En la misma línea, el presidente de la Unión de Consumidores de España (UCE), José Ángel Oliván, en declaraciones a Servimedia, aseguró que "los controladores aéreos están abusando de la situación en la que se encuentran los viajeros y están abusando de la legislación laboral. Las autoridades tienen que ponerse manos a la obra para evitar esos abusos".

Oliván reconoció que "el sentido común nos hace pensar que efectivamente lo que está habiendo son medidas de presión en un contexto de negociación laboral", y afirmó que "los trabajadores tienen todo el derecho a defender sus posiciones, pero utilizando la normativa, en vez de subterfugios que perjudican a los viajeros".

Por su parte, la portavoz de la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), Ileana Izverniceanu, declaró que "respetamos las huelgas, pero no las presuntas huelgas en las que no hay defensa por parte de la empresa porque no se pueden establecer servicios mínimos al no ser una huelga declarada".

Izverniceanu señaló que "Fomento tiene que actuar con fuerza para que no queden impunes este daño y este perjuicio que se está creando a muchísimos pasajeros porque además se está dañando la imagen de un país muy deteriorado ya económicamente, y en el que una de sus mayores fuerzas es el turismo".

SECTOR TURÍSTICO

La Mesa del Turismo acusó este lunes a los controladores aéreos de estar tomando como rehenes a los pasajeros aéreos, "lo que supone un auténtico sabotaje contra la economía nacional y, por supuesto, contra el sector turístico".

En una nota de prensa, la Mesa recuerda que el sector turístico "venía pasando unos momentos muy difíciles" y que llegaba ahora la temporada alta, que "podría compensar un poco esa delicada situación y convertirse así nuevamente en el motor de la economía nacional y concretamente, de la creación de empleo".

"Que un número escaso de trabajadores, dentro del total de la población laboral, como son los controladores aéreos, pueda impedir esa recuperación para asegurarse ellos unos privilegios inasumibles por la economía de este país y conquistados, a base de presiones inadmisibles durante muchos años, aprovechando la fuerza de coacción que les depara su actividad, está totalmente desprovisto de la mínima racionalidad, sentido de la justicia y, desde luego, de solidaridad con el resto de los trabajadores de España", agrega el escrito.

Por último, el Partido Popular anunció que va a pedir la comparecencia inmediata del ministro de Fomento, José Blanco, en el Congreso de los Diputados, para que explique si ejerce como tal o "se dedica sólo a lanzar frases ocurrentes contra el PP" y por eso no ha tenido tiempo de prever la situación provocada por la acumulación de supuestas bajas laborales (para algunos, una huelga encubierta) de los controladores aéreos.

Así lo anunció el vicesecretario general de Comunicación de los populares, Esteban González Pons, en la rueda de prensa posterior al Comité de Dirección del partido. Desde su punto de vista, "si Blanco se dedicara a ser ministro no ocurriría lo que está ocurriendo en los aeropuertos".