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LA ECONOMÍA ESPAÑOLA CAYÓ UN 4,2% EN EL SEGUNDO TRIMESTRE, UNA DÉCIMA MÁS DE LO AVANZADO

- El empleo decrece a un 7,1%

MADRID
SERVIMEDIA

El Producto Interior Bruto (PIB) español registró un descenso del 4,2% en el segundo trimestre del año respecto al mismo periodo de 2008, una décima más de lo que apuntaba el avance publicado hace unas semanas.

Según informó hoy el Instituto Nacional de Estadística (INE), el crecimiento intertrimestral se situó en el –1,1%, cinco décimas menos negativo que en el trimestre anterior. Esta cifra también se ha revisado, pues en el avance se estimaba una tasa de -1%.

La aportación al crecimiento agregado de la demanda nacional decrece 1,2 puntos (pasa de –6,1 a –7,3 puntos) mientras que la demanda externa aumenta dos décimas su contribución al PIB trimestral (pasa de 2,9 a 3,1 puntos).

Por su parte, El PIB valorado a precios corrientes se contrajo un 4,1% en el segundo trimestre de 2009, reduciendo 2,2 puntos su ritmo de avance. Así, el deflactor implícito de la economía crece un 0,1%, 1,2 puntos inferior al del trimestre anterior.

DEMANDA NACIONAL

Desde el INE explicaron que al igual que en los periodos precedentes, el aumento de la contribución negativa de la demanda nacional en este trimestre se debe "a la mayor contracción tanto del gasto en consumo final de los hogares como de la inversión en capital fijo".

Por su parte, el gasto de las Administraciones Públicas se desacelera en este trimestre, aunque sigue presentando tasas de crecimiento "significativamente positivas".

En concreto, el gasto en consumo final de los hogares continua su decrecimiento, pasando del –5,1% al –5,9%, si bien de forma menos intensa que en el trimestre anterior. El factor esencial de este comportamiento es la continua reducción del empleo en la economía, lo que determina un descenso en el nivel de ingresos de las familias por la vía de los salarios. La remuneración de asalariados se redujo un 2,6%.

Analizando los distintos componentes del gasto, se observa una desaceleración en el ritmo de descenso del gasto en alimentos y en bienes duraderos, mientras que en el resto de bienes y en servicios, el decrecimiento continúa siendo superior al del primer trimestre.

Por su parte, el gasto en consumo final de las Administraciones Públicas se desaceleró en el segundo trimestre, desde el 6,4% hasta el 5,1%, como consecuencia del menor ritmo de avance de las compras de bienes y servicios, parcialmente compensado por el aumento de la remuneración de los asalariados del sector.

Mientras, la formación bruta de capital fijo aumenta su caída en el segundo trimestre, del –15,2% al –17%, de forma común en todos sus productos. La demanda de bienes de equipo continúa siendo la que presenta las tasas de crecimiento más negativas, al pasar del –24,2% al –28,9%.

La inversión en maquinaria (–31,7%) presentó una caída mayor que la de material de transporte (–22,2%). Además, la inversión en construcción decrece un 12% en el segundo trimestre, medio punto más que en el período anterior.

Aquí, la obra en infraestructuras mantiene tasas de crecimiento positivas (1,2%), especialmente la vinculada al entorno de las corporaciones locales y la ligada a la alta velocidad ferroviaria, mientras que la inversión en vivienda continúa su trayectoria descendente (–25,5% frente a –24,3% del trimestre anterior).

DEMANDA EXTERIOR

La demanda exterior neta de la economía española aumentó dos décimas su aportación positiva al crecimiento agregado del segundo trimestre del año, (3,1 puntos frente a 2,9 del primero). Tanto las exportaciones como las importaciones registraron tasas de crecimiento interanuales menos negativas que en el período anterior.

Las exportaciones de bienes y servicios repuntaron casi dos puntos, del –17,6% al –15,7%, como consecuencia "fundamental de la mejor evolución de la demanda nacional de los países a los que se destinan aquellas, especialmente de la Unión Europea".

Por componentes, se estiman sendas mejoras tanto para la exportación de bienes (del –20,9% al –17,0%) como para el gasto turístico de los no residentes (del –14,5% al –9,7%). De forma opuesta, la exportación de servicios no turísticos continuó su trayectoria descendente, pasando del –7,2% al –15,7%.

De forma similar, las importaciones de bienes y servicios desaceleraron su contracción en este trimestre, si bien de forma menos intensa que las exportaciones, pasando del –22,9% al –22,3%. Al igual que como sucedía con aquellas, se aprecian mejoras en la importación de bienes (del –24,9% al –24%) y en las compras de residentes en el resto del mundo (del –19,8% al –12,9%), mientras que las importaciones de servicios no turísticos continúan su pauta decreciente (del –14,1% al –16,1%).

Desde la óptica de la oferta, y con la excepción de las ramas primarias, todas las actividades, a nivel agregado, registraron crecimientos más negativos en su valor añadido que en el trimestre anterior.

Así, el valor añadido bruto de las ramas industriales aumentó su caída hasta el –16,8% en este trimestre, tres puntos más que en el periodo anterior. Por su lado, las ramas energéticas presentaron un decrecimiento del –9,7%.

El valor añadido bruto de la actividad de la construcción decrece a un ritmo del 6%, tres décimas más que en el primer trimestre, de forma acorde con la producción y los consumos intermedios (producción de materiales de construcción, consumo aparente de cemento y obra subcontratada.

Por lo que se refiere a las ramas de los servicios, el crecimiento de su valor añadido bruto se redujo en casi un punto, pasando del –0,2% al –1,1% en el segundo trimestre. Sus dos grandes componentes presentan trayectorias opuestas. Los servicios de mercado intensificaron su decrecimiento, del –1% al –2,3%, mientras que los servicios de no mercado aceleraron su ritmo de avance en seis décimas, del 2,6% al 3,2%.

Dentro de las actividades de servicios de mercado, las ligadas al comercio y al turismo experimentaron un leve repunte en este trimestre, de forma acorde con las menores caídas observadas tanto en las ventas de automóviles, en el índice de comercio al por menor y en el gasto turístico de los no residentes. Aún así, sus registros interanuales continúan siendo negativos.

En el lado opuesto, las actividades inmobiliarias, de servicios a empresas y las de intermediación financiera fueron las que registraron una contracción más intensa en este trimestre.

Finalmente, el valor añadido de las ramas primarias registraron una tasa de crecimiento menos negativa en este trimestre (–1% frente al –2,3% del anterior) en línea con la evolución estimada para la producción agraria y ganadera.

EMPLEO

Por su parte, el empleo, medido en términos de puestos de trabajo equivalentes a tiempo completo, se redujo un 7,1% en el segundo trimestre del año, ocho décimas más que en el primero. Este resultado supone la disminución de casi 1.369.000 de empleos netos a tiempo completo en un año.

En el análisis por ramas de actividad, señalaron desde el INE, se observa que todas las actividades de mercado, a nivel agregado, continúan registrando tasas de crecimiento negativas. Las más intensas corresponden a la construcción que, no obstante, repuntó una décima en este período, "ofreciendo síntomas de haber alcanzado el mínimo en el primer trimestre del año".

De la consideración conjunta del crecimiento del PIB trimestral y del empleo ocupado a tiempo completo, se deduce que la variación interanual de la productividad aparente del factor trabajo es del 3,2%, cifra una décima inferior a la del período precedente.

(SERVIMEDIA)
27 Ago 2009
BPP/pai