Además, según Asaja, durante el último quinquenio las organizaciones agrarias francesas dirigieron reiteradas amenazas y coacciones a las centrales de compra, supermercados y grandes almacenes que comercializaban productos agrícolas españoles.

Esas amenazas se materializaron en sucesos como la quema del almacén de importación de frutas de Nimes en julio de 1993, y a destrucción de varios cientos de toneladas de frutas y hortalizas en sucesivos ataques contra superficies comerciales.

En cuanto a los vehículos de transporte, los agricultores franceses atacaron, el 27 de julio de 1993 en Touluse, 10 camiones que exportaban pimientos y vino blanco. El 17 de abril de 1994 arremetieron contra 25 camiones de fresas entre Narbona y Montpellier, y el 25 de abril de 1996, atacaron 5 camiones que transportaban 23 toneladas de fresón y 50 de hortalizas, entre otras altercaos.

Asimismo, las asociaciones agrarias francesas provocaron un bloqueo de la exportación entre el 22 y 29 de noviembre de 1996, que afectó a 2.000 vehículos, y la retención de camiones en octubre del mismo año.

En un comunicado hecho público hoy, ASAJA denunció que la sentencia condenatoria del Tribunal de Luxemburgo contra la República Francesa "no han servido para que los vándalos agricultores franceses cesen en las agresiones y reanuden, un año más, la campaña de chantaje a la que someten a iportadores y grandes superficies".

ASAJA anunció que si continúan las amenazas e intimidaciones "emprenderá una campaña de boicot contra los productos franceses similar a la del pasado año, en que las ventas de artículos del país vecino cayeron en España más de un 30 por ciento, gracias a la solidaridad de los consumidores.