Castilla-La Mancha. Una campaña intenta prevenir las lesiones medulares por zambullidas imprudentes

-Las zambullidas suponenhasta el 6% del total del número de ingresos en los últimos diez años

MADRID/TOLEDO
SERVIMEDIA

Coincidiendo con el inicio de las vacaciones de verano, el Hospital Nacional de Parapléjicos de Toledo, dependiente del Gobierno de Castilla-La Mancha, ha puesto en marcha la campaña “Piénsatelo. No vayas de cabeza”, destinada a prevenir las lesiones medulares como consecuencia de zambullidas imprudentes que, según los datos que maneja el propio centro sanitario, han supuesto hasta el 6% del total del número de ingresos en los últimos diez años.

Según datos de Dirección Médica, durante 2009 el Hospital Nacional de Parapléjicos trató a un total de ocho pacientes con lesión medular por zambullida, mientras que en 2008 el número de ingresos fue de tres. En 2010 aún no se ha registrado ningún ingreso por esta causa.

El perfil de los pacientes que sufren este tipo de lesiones es el de una persona joven, entre el 80% y el 90% de los lesionados medulares por zambullida tienen edades que oscilan entre los 15 a los 25 años, en su mayoría varones, que presentan una luxación o fractura a nivel de las vértebras del cuello, lo que provoca tetraplejia.

La causa principal que arroja estas cifras se debe a que los bañistas no tienen conciencia del peligro que puede suponer sumergirse en el agua de forma inadecuada.

Profesionales del Servicio de Rehabilitación del Hospital de Parapléjicos reconocen que la prevención es factible tomando las medidas oportunas para evitar las lesiones medulares, ya que un elevado porcentaje de las lesiones que se producen por zambullidas en piscinas, ríos o en el mar se pueden evitar.

Por este motivo, el hospital toledano pone en marcha todos los años, al inicio del verano, la campaña cuyo lema es “Piénsatelo. No vayas de Cabeza”, destinada a lanzar mensajes preventivos a la sociedad.

La campaña aconseja sumergirse lentamente y tener en cuenta la profundidad de una piscina, un río o el mar y la altura desde la que uno se sumerge.

Además, la persona debe zambullirse con los brazos situados en prolongación del cuerpo, protegiendo el cuello y la cabeza. Por otra parte, en caso de que se produzca un accidente, y ante la necesidad del traslado de un lesionado medular, hay que inmovilizar el cuello, evitar movimientos de columna y avisar a un profesional para que realice el traslado, no transportando nunca al lesionado en un vehículo utilitario.

(SERVIMEDIA)
18 Jul 2010
CDM/gja