En esta idea coincidieron hoy representantes del Ministerio de Industria y expertos en Derecho que participaron en un encuentro sobre la Ley General de la Comunicación Audiovisual, organizada por el bufete de abogados Garrigues y Analysys Mason.

El subdirector general de Medios Audiovisuales del Ministerio de Industria, Fernando Castillo, aseguró que los operadores le han transmitido al Gobierno su "inquietud" ante las dificultades que observan para saber si determinados contenidos que emiten se acomodan o no a la ley.

Castillo reconoció que hay en la norma "conceptos jurídicos indeterminados difíciles de interpretar", entre los que mencionó el "respeto a la dignidad de la mujer", la "violencia gratuita" o la "pornografía". De esta última destacó que ni siquiera existe una definición legal.

"Por ejemplo, hablar de no emisión en determinados horarios de contenidos que fomenten el culto al cuerpo queda muy bonito en la ley, pero determinar cuándo se promueve ese culto al cuerpo no será sencillo", aventuró el representante de Industria.

Lo mismo teme que ocurrirá con casuística concreta como las emisiones publicitarias permitidas cuando haya interrupciones en eventos deportivos. "Si un jugador recibe atención en el campo por una lesión, ¿será interrupción", se preguntó. "A cada lectura que hago de la ley me surge una duda nueva".

Ante las dudas que le han transmitido al Gobierno las cadenas por este motivo, afirmó que "se ha planteado la oportunidad de elaborar un documento de criterios" o un "reglamento general de aplicación". "Pero es algo que no está en nuestra agenda", aclaró, "porque no queremos condicionar lo que decida el Consejo Estatal Audiovisual y, además, podría suponer reabrir heridas o abrir un melón que no sería bueno. Vamos a ir resolviendo los problemas según se vayan produciendo; lo que sí tenemos claro es que, ante la duda, la interpretación siempre va a ser estricta".

La indeterminación jurídica de la Ley Audiovisual también la apuntó la catedrática de Derecho Administrativo Carmen Chinchilla: "La práctica planteará problemas al Consejo Estatal de Medios Audiovisuales (CEMA) en la ejecución de su potestad sancionadora", porque "¿qué es un comportamiento nocivo para la salud", contrario a la dignidad humana o que fomenta el desprecio?".

Chinchilla cree que el éxito del CEMA ante retos como éste dependerá de que los partidos elijan a sus nueve vocales como consejeros realmente independientes, ajenos a condicionamientos políticos.