Así se recoge en un estudio elaborado por la consultora de recursos humanos Randstad, para el que se ha entrevistado a un total de 1.593 personas por toda la geografía española durante el mes de agosto.

Según explican los responsables del estudio, el síndrome postvacacional describe la dificultad del trabajador a la hora de adaptarse de nuevo al empleo después de su periodo de descanso. Este síndrome se expresa en una serie de síntomas que pueden variar: irritabilidad, tristeza, insomnio, dolores de cabeza, alteraciones en el apetito o desmotivación.

El perfil del afectado por este síndrome es el de una mujer, española, de entre 25 y 29 años y con estudios universitarios. Las mujeres sufren más que los hombres este síndrome postvacacional. Ellas afirman sufrirlo en un 63% de ocasiones, frente al 51% de los varones.