En la rueda de prensa posterior a la reunión de la Ejecutiva Federal del partido, a la que asistió el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, Pajín se felicitó de que el G-20 se haya "consolidado como espacio de coordinación política" para dar una "respuesta unitaria" y porque España, a su vez, haya "consolidado su presencia como miembro de estas cumbres". Apostilló que esta presencia de hecho, si la hubieran conseguido los gobiernos de otros partidos, en referencia al PP, se habría oído pregonar "a bombo y platillo".

Sobre la reunión en concreto, la dirigente socialista afirmó que España defendió allí lo que ya ha defendido en la UE y que ha "conseguido que sea aplaudido pese a las reservas iniciales". En concreto, dijo que Zapatero presentó su "hoja de ruta" para la reforma laboral, la de las pensiones y la fusión de las cajas, y que aquélla fue "reconocida y valorada positivamente por el resto de países, que ya habían manifestado que las medidas españolas "van en la buena dirección".

A nivel mundial, explicó que se dedició avanzar en dos líneas: la necesidad de reducir el déficit y la de poner reglas al sistema financiero. Sobre esto último, indicó que España "ha trabajado para que haya avances mayores", pero aun así quiso hacer una "valoración positiva" y justificó el resultado explicando que "no es fácil" llegar a acuerdos entre tantos. No obstante, advirtió que "en los próximos meses tendrá que haber una profunda reforma del sistema bancario", que a su juicio ya está realizando España en el suyo.