Gallardón explicó que estas inversiones posibilitarán que este espacio verde cumpla una función social y otra medioambiental. El Parque de Berlín presta servicio a más de 140.000 vecinos de Chamartín y el intenso uso del mismo ha llevado al ayuntamiento a acometer unas obras que hagan más fácil su preservación, según el alcalde.

La intención del consistorio es que este "pulmón" de casi cinco hectáreas cumpla tres funciones: una social, como punto de encuentro para los ciudadanos, para lo que se crearán nuevas zonas infantiles y se renovará el mobiliario urbano; otra medioambiental, con la ampliación de las zonas ajardinadas y el arbolado, y una tercera centrada en que el parque sea un lugar que fomente la práctica del deporte.

El alcalde explicó que con las dos fases de trabajos presentadas hoy se cumplirán los dos primeros propósitos, y aseguró que cuando se terminen los trabajos, que se prolongarán hasta el próximo año, "el Parque de Berlín habrá renovado cerca de 4.600 metros de praderas y tendrá 40 nuevos árboles, 480 arbustos y casi 1.500 plantas".

La tercera fase de los trabajos se centrará en fomentar la práctica del deporte en el parque, para lo que se construirán nuevas instalaciones deportivas, aprovechando la cubierta y las zonas cercanas al futuro aparcamiento para residentes, que se sumarán al campo de fútbol 7 y los nuevos vestuarios inaugurados hace unos meses, que supusieron una inversión de más de medio millón de euros.

Ruiz-Gallardón concluyó que la intención del ayuntamiento es que este parque, inaugurado en 1967 por el entonces alcalde de Berlín, Willy Brandt, "sea algo más que una zona verde; queremos que sea una escuela de convivencia, alternativa de ocio y elemento que fomente el deporte entre los ciudadanos".