El acuerdo fue suscrito por la Junta de Extremadura, la Corporación Regional Empresarial Extremeña (Crex), la Federación de Municipios y Provincias Extremeñas (Fempex) y los sindicatos UGT y Comisiones Obreras.

El tercer Plan de Empleo, con un presupuesto de 40.000 millones, se divide en dos grandes áreas y establec medidas para reactivar el mercado de trabajo e incentivar el empleo y la productividad, así como la formación ocupacional.

En cuanto al Primer Plan Industrial, cuenta con un presupuesto de 40.000 millones de pesetas y consta de siete grandes apartados, entre los que destacan el apoyo a la iniciativa privada, la participación en la Sociedad de Fomento Industrial de la región y las ayudas a la exportación.

Según el presidente de la Junta, Juan Carlos Rodríguez Ibarra, "el Plan Industrial se ha firado cuando Extremadura ha podido, cuando ésta ya cuenta con unas determinadas infraestructuras y condiciones".

Añadió que su objetivo es equilibrar los sectores industriales y de servicios con otros de mayor peso en la economía extremeña, como la agricultura.

Por su parte, el consejero de Economía del Gobierno extremeño, Manuel Amigo, señaló que las ayudas del Plan Industrial irán destinadas "no a ideas, sino a proyectos concretos", y anunció que las ayudas estarán directamente relacionadas con l demanda empresarial de la zona, y no con la población o el número de desempleados.