El director general de Acción contra el Hambre,Olivier Longué, declaró hoy que 6 millones de niños menores de cinco años mueren cada año por causas relacionadas con la desnutrición, siendo esta la primera causa de mortalidad infantil.

El último informe anual de esta ONG destaca las implicaciones políticas de las hambrunas que padecen millones de personas, la mayoría habitantes de países africanos, americanos y asiáticos.

Olivier Longué aseguró que "el hambre es un problema político, no una fatalidad. No hay ninguna situación de hambruna que tnga su origen principal en causas climáticas o que no se puedan solucionar".

Para ilustrar esta aseveración, el informe detalla los casos de 6 de los 40 países en los que trabaja Acción contra el Hambre: Sierra Leona, Etiopía, Chechenia, Timor Oriental, Angola y Corea del Norte.

El documento y los expertos de la organización concluyen que el control por los yacimientos de piedras preciosas y metales de Sierra Leona y República Democrática del Congo o los de petróleo de Angola, primer productor deAfrica, están en el origen de la pobreza que sufre la mayor parte de los habitantes de estos países.

En el caso de Chechenia, Longué indicó que la necesidad de controlar estos oleoductos influye decisvamente en el conflicto con Rusia y también es determinante en el apoyo que las potencias occidentales dan a Moscú.

En este sentido, apuntó que la población civil, fundamentalmente niños, mujeres y ancianos, es la que padece las consecuencias de estos conflictos y las decisiones de los gobernantes. Por este motivo, el director de Acción contra el Hambre dijo que en el planeta hay personas que pasan hambre "porque hay otras que han decidido que deben padecer esa situación. El hambre se utiliza como arma de guerra".

Las cifras de esta ONG indican que más de 1.000 millones de personas carecen de acceso al agua potable, más de 2.400 millones no tienen un saneamiento adecuadao y 1.000 millones de adultos son analfabetos funcionales.

Sin embargo, Olivier Longué señaló que también es posible exoner situaciones positivas y avances, como en Mali, donde el final de la guerra ha permitido iniciar la recuperación económica del país.