Según el sindicato, esto implica una clara disminución en la dedicación a las distintas áreas de intervención y una merma en el derecho a una asistencia pública y de calidad de la ciudadanía, en especial de los derechos de las personas drogodependientes.

Cuando se cumple el plazo para que las entidades privadas presenten sus proyectos a la convocatoria de adjudicación de los Centros de Atención Integral a Drogodependientes (CAID) de la Comunidad de Madrid, "nos encontramos ante un aumento de servicio con una dotación de recursos presupuestaria y humana inferior".

Durante los últimos años, no se ha observado una disminución en la demanda de atención de estos centros, que podría ser el único motivo por el cual se justificase un recorte de presupuesto y por tanto de profesionales, por lo que nos encontramos en la necesidad de atender al mismo número de usuarios con un descenso importante de los equipos.

En relación con la calidad del tratamiento que reciben las personas drogodependientes, el sindicato también denuncia el carácter excesivamente medicalizado de la atención.

Por ello, concluye que "es una preocupación importante, para CCOO de Madrid, el recorte de derechos que genera la trayectoria que está tomando la gestión de los servicios públicos en la Comunidad, que favorece la invisibilización del problema social de las drogodependencias".