El padre de la menor demandó al rotativo por los daños y perjuicios sufridos por su hija, quien a partir de la publicación de su fotografía tuvo “sentimientos intensos de tristeza y ansiedad al percibir la generación de una amenaza para su propia vida”, según certificó una psicóloga.

Los magistrados de la Sala de lo Civil del Tribunal Supremo, presididos por Xavier O’Callaghan, han dado la razón a la familia de la menor y han desestimado los recursos interpuestos por “La Opinión de Granada” contra las sentencias de los tribunales de instancia, que ya fallaron a favor de la pequeña.

La citada noticia apareció publicada el 6 de abril de 2004 en la portada del diario y bajo el título “Al Qaeda amenaza con convertir España en un infierno. Juramos por Alá que haremos fluir vuestra sangre como ríos”.

El padre de la menor se puso en contacto con los responsables de “La Opinión de Granada” para solicitar que no volvieran a utilizar la imagen de su hija, pero el periódico volvió a publicar la misma fotografía el 18 de agosto de ese año.

A pesar de que el diario alegó que había difuminado la cara de la pequeña, el Supremo considera que la menor era “perfectamente reconocible”. “La difuminación utilizada sobre sus ojos es mínima y no es suficiente para ocultar su identidad y rostro”, señala la sentencia hecha pública hoy.

Los magistrados del Alto Tribunal han tenido en cuenta además que la menor no aparece en la fotografía de una manera accidental “sino que fue puesta en ese concreto sitio y se le hizo para señalar la puerta donde había sido detenido un presunto grupo terrorista”.

Además de los 30.000 euros de indemnización, el periódico deberá publicar el texto integro de la sentencia y se le ha prohibido volver a utilizar la fotografía de la menor.