Funcionarios de la cárcel de Alcalá-Meco mantenían “una relación de excesiva confianza” con reclusas del centro, según Gallizo
- El PP cuestiona que se actuara con la suficiente diligencia en este caso
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Un “pequeño número de funcionarios” de la cárcel de Alcalá-Meco (Madrid I) mantenían una “relación de excesiva confianza” con reclusas de este centro, lo que se concretó en el consumo de alcohol y, posiblemente, en relaciones sexuales.
Así lo relató hoy en el Congreso de los Diputados la secretaria general de Instituciones Penitenciarias, Mercedes Gallizo, quien acudió a explicar el cese en abril de tres responsables de la cárcel de Alcalá-Meco por no actuar diligentemente ante presuntas irregularidades por parte de funcionarios.
Tras insistir en que lo sucedido en esta prisión madrileña no es extensible a la mayoría de los funcionarios de los centros penitenciarios, Gallizo relató que, tras la denuncia de una funcionaria, se ha probado la existencia de dos incidentes en Alcalá-Meco. Además, se ha constatado que había “una relación de excesiva confianza” de un “grupo de presas” y un “pequeño número de funcionarios”, algo que transgredía “los límites que deben regir” entre los funcionarios y los presos.
Gallizo relató que los incidentes probados tuvieron lugar el 31 de diciembre de 2009 y la noche del 4 al 5 de abril de 2010. En el primer caso, un funcionario consumió bebidas alcohólicas junto a algunas internas.
En el incidente del 4 de abril, un funcionario despertó a las presas encargadas del economato para comprar alcohol. Posteriormente, según Gallizo, existe “una alta posibilidad de que se mantuvieran relaciones impropias con las internas en la celda número 3 durante el horario nocturno”.
ACTUACIÓN LEGAL
La responsable de prisiones destacó que se ha actuado ante estos hechos y, además del cese de tres responsables de Alcalá-Meco, se puso estos hechos en conocimiento de la Fiscalía de Madrid por si se podía haber cometido algún delito. Asimismo, Gallizo destacó su “absoluto rechazo” a estas conductas, aunque insistió en que su departamento actuó en cuanto tuvo conocimiento de lo sucedido.
Por su parte, la diputada del PP Carmen Navarro cuestionó que el departamento de Gallizo hubiera actuado con la suficiente diligencia en estos hechos, al tiempo que afirmó que es “bueno” que se esclarezcan estos hechos.
A su vez, Emilio Olavarria, del PNV, sostuvo que, por los datos que tiene, lo ocurrido en la cárcel de Alcalá-Meco es más grave de lo planteado por Gallizo, a quien el parlamentario nacionalista pidió aclarar totalmente estos hechos.
(SERVIMEDIA)
16 Jun 2010
NBC/caa