El número de enfermos crónicos que han fallecido en la comunidad autónoma desde el pasado lunes 17 de julio por agravamiento de sus patologías asciende a 19, 16 de ellos en Sevilla y 3 en Córdoba, provincias que alcanzaron el domingo su récord histórico, con 46,6 grados a la sombra y 54 grados en los termómetros urbanos de las calles, unas décimas más que el récord alcanzado en 1922.

De los 19 fallecimientos, 17 se han producido en centros hospitalarios y 2 en domiclios particulares. En Córdoba se encuentran ingresadas en el hospital Reina Sofía 31 personas, 11 de ellas hospitalizadas desde este pasado fin de semana.

En Sevilla permanecen ingresadas 22 personas en el hospital Virgen del Rocío, donde han fallecido 10 personas. En el Virgen Macarena ha muerto una persona y están ingresadas otras 10, dos de ellas en la Unidad de Cuidados Intensivos, mientras que en el hospital Valme de la capital hispalense han fallecido 3 pacientes y permanecen internadas otras 13personas.

Sin embargo, de cada diez muertes sólo una puede achacarse directamente a los efectos del calor, según confirmaron hoy responsables del servicio de emergencia sanitaria andaluz. La mayoría de los fallecimientos corresponden a pacientes crónicos con dolencias cardiopulmonares.

Según los expertos meteorológicos, estas temperaturas, que han vuelto a repetirse hoy, no se daban en las dos capitales andaluzas desde hacía 30 años.