Matesanz explica que este primer trasplante "no es una carrera por ver quién llega el primero, sino un proceso para curar a tres enfermos, éste que ha encontrado la vía de curación en Valencia, pero hay otros dos en Sevilla y Barcelona" y "lo que necesitamos ahora es que se produzcan otros dos donantes para que en el menor tiempo posible estos tres pacientes puedan recuperar la salud y las ganas de vivir".

A renglón seguido, expresó su preocupación "y la de todos los que trabajamos en la ONT por el hecho de que se hayan filtrado algunos datos del donante. Afortunadamente, no del todo ciertos, pero hay que tener en cuenta que la privacidad es un elemento fundamental en todos los trasplantes, pero más en los trasplantes de cara".

En este sentido, Matesanz recalcó que otras dos personas esperan donante "y el mensaje que se puede transmitir a la población, si se dan datos de la persona que ha donado la cara, no es realmente positivo".

Finalmente, mostró su más "sinceras felicitaciones por el éxito conseguido en el Hospital la Fe de Valencia. En primer lugar al paciente, que ha sido el gran beneficiado y que todos esperamos su rápida recuperación, y en segundo lugar al doctor Cavadas y a todo su equipo, que han hecho posible esta proeza teconológica".

Así, subrayó que este trasplante de cara es el octavo del mundo y el primero en España, y alabó el sistema de coordinación, "porque todo el sistema estaba alerta y desde que se dio la autorización hasta que se ha hecho el trasplante ha transscurrido menos de dos meses, y desde que se presentó la solicitud en la ONT menos de tres meses, un tiempo récord, porque en Francia cuando cuando se hicieron los primeros trasplantes transcurrió mas de seis meses antes de que se consiguió el donante".