Así lo comunicó en nota de prensa alegando que "considera que es necesario estar en ese proceso porque se vierten amenazas directas a un agente de Policía Municipal, por protección a la ciudadanía ante posibles delitos de odio, por posible falta grave a una superior (Carmena) y por la mala imagen que se está generando del cuerpo de Policía Municipal y del Ayuntamiento de Madrid".

El Consistorio recordó que desde ayer está abierto también el procedimiento disciplinario interno en la llamada fase de información reservada, previa a la incoación de expediente disciplinario. Una vez finalizada esa fase, se podrán aplicar medidas disciplinarias acordes al reglamento interno de Policía Municipal.

Ayer, el delegado de Salud, Seguridad y Emergencias, Javier Barbero, notificó que el Gobierno municipal está “pensando la posibilidad de tomar una serie de medidas en torno a la inhabilitación de estas personas”.