Este acto fue motivado por los desencuentros habidos en las Mesa Sectorial de Educación para negociar los procesos de estabilización del personal para la aplicación del Acuerdo para la Mejora del Empleo público de 29 de marzo y los Presupuestos Generales del Estado de 2017 y de esta manera reducir la tasa de interinidad por debajo del 8%.

Estos sindicatos, que señalaron que en la educación pública no universitaria, con diferencias entre las comunidades autónomas, la tasa de interinidad se sitúa en torno al 26%, defendieron que las personas aspirantes en los próximos procesos deberían tener las máximas facilidades para superar la fase de oposición.

En este sentido, consideran “fundamental” que se implemente con carácter excepcional un nuevo Real Decreto de Ingreso a la Función Pública Docente que posibilite este fin y para lo cual debe contemplar que las pruebas de la fase de oposición no sean eliminatorias, que aumente la optatividad en la elección de temas, el aumento de la ponderación de la fase de concurso respecto a la oposición y un incremento del peso de la antigüedad en la fase de concurso.

El secretario general de la Federación de Enseñanza de CCOO, Francisco García, quien destacó que las organizaciones presentes “representamos al 80% del profesorado de este país”, remarcó que “este proceso de consolidación del empleo no puede suponer una frustración para los miles de interinos que hay en nuestro país y para el conjunto de personas que aspiran a presentarse a las oposiciones”.

Por ello, pidió al ministro Íñigo Méndez de Vigo “tiempo” y que “no cierre precipitadamente la Mesa, como tiene intención de hacer, porque será sin acuerdo” y provocará que “los sindicatos que estamos aquí pondremos encima de la mesa otro tipo de medidas”.

“NADA ES DESCARTABLE”

Tras ser preguntado por cuáles serán las medidas a aplicar si finalmente fracasa esa negociación, García afirmó que “nada es descartable”, aunque añadió que “nada está concretado todavía”.

En la misma línea, la responsable de Enseñanza Pública de FESP-UGT, María Luisa Vico, afirmó que “las plazas que están siendo ofertadas son insuficientes para reducir la tasa de interinidad al 8%”, puesto que “habría que convocar 150.000 plazas, cosa que ahora no está encima de la mesa”.

Por su parte, el presidente del sector de Educación de CSIF, Mario Gutiérrez, denunció que “en comunidades como Madrid y Andalucía no tenemos ningún dato al respecto” de cuántas plazas se ofertarán y remarcó que “lo que es más triste es que en el territorio del Ministerio de Educación, como son Ceuta y Melilla, tampoco tenemos datos al respecto”.

Finalmente, el representante de STES Intersindical José Ramón Merino reclamó “un sistema de acceso más justo y más equilibrado”, en el que “no tenga que jugarse todo en una sola prueba”, y expresó su deseo de que “el Ministerio no haga oídos sordos y que no se comporte como se comportó el ministro (José Ignacio) Wert”.