García-Escudero se refirió a esta cuestión en un acto organizado en la Cámara Alta por la Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT), que llevaba por título ‘La derrota policial de ETA’ y en el que se entregaron diversos galardones a funcionarios y otras personas que destacaron por su labor contra la banda etarra.

Entre los galardonados estaban responsables de información de la Guardia Civil y la Policía Nacional, así como alcaldes de distintas localidades, como Pozuelo de Alarcón y Boadilla del Monte, ambas de Madrid. Además, recogió una distinción el actual vocal del CGPJ y exmagistrado de la Audiencia Nacional Fernando Grande-Marlaska.

En su intervención, el presidente destacó la importancia de la derrota de ETA a manos de la sociedad española, algo que dijo se consiguió “con el uso de los instrumentos que nos proporcionó aquello que los terroristas y cualquier enemigo de la democracia más puede aborrecer: el Estado de derecho y las reglas del juego democrático”.

“UNIDAD DE LOS PARTIDOS”

“Lo que derrotó a ETA”, afirmó García-Escudero, “y lo que siempre derrotará a cualquier grupo terrorista fue una eficaz combinación de acción policial y judicial, cooperación internacional para mejorar la capacidad de respuesta”.

Asimismo, se refirió a que “no menos importante” para acabar con la banda etarra fue “la unidad de los partidos políticos y la movilización de la sociedad frente al desafío de la violencia”. “Cada uno de esos ingredientes permitió acabar definitivamente con la banda ETA”, remarcó.

Al mismo tiempo, el presidente de la Cámara Alta resaltó la importancia que tuvo la “acción de la política” contra los etarras y dijo que ejemplo de ello eran los tres senadores que fueron asesinados por la banda criminal (Enrique Casas, Manuel Broseta y Manuel Jiménez Abad).