El comité de empresa de Figueruelas ha acordado no posicionarse sobre las propuestas mejoradas de Magna y RHJ International para hacerse con Opel, mientras tengan lugar las negociaciones sobre el futuro de la compañía automovilística. Los representantes de los trabajadores de la planta zaragozana de GM apoyarán los planteamientos que se basen en criterios industriales “y no políticos”.

En el encuentro de este martes, los miembros del comité han evaluado las ofertas presentadas inicialmente, porque “las modificaciones, creemos, no han afectado a los planes industriales”, ha explicado su presidente, José Juan Arcéiz. Sin embargo, ha añadido que el proyecto de la firma belga RHJ International “es menos agresivo que el de Magna porque da más tiempo”.

Arcéiz ha destacado la importancia de que General Motors tome la decisión sobre la venta de Opel, “y no el que haya puesto más dinero”. Por otra parte, ha mostrado su confianza en que las negociaciones permitan conocer el inversor definitivo de la compañía automovilística en las dos próximas semanas.

Ante las intensas reuniones sobre el futuro de Opel, los trabajadores de Figueruelas se encuentran “bastante preocupados y con mucha incertidumbre”, según ha resaltado el presidente del comité de empresa. Por el momento, General Motors sigue estudiando las ofertas mejoradas de la firma belga RHJ International y del fabricante de componentes Magna.