De este modo, el punto de vista de Gestha se opone al de Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), según la cual los territorios ‘offshore’ “dejarán de existir en apenas unos años al contar con acuerdos para intercambiar información tributaria”.

A este respecto, Gestha recordó que la firma de dichos acuerdos “no garantiza el intercambio efectivo de información”. “En virtud de esos acuerdos se puede pedir la información que se conoce, pero es imposible pedir la información que una Administración tributaria desconoce”, explicó el sindicato.

Asimismo, Gestha señaló que la primera lista europea de paraísos no cooperativos excluirá a los centros ‘offshore’ “con escasa o nula tributación y de apreciable opacidad en ámbitos bancario, registral y mercantil”. Por tanto, a juicio de los técnicos de Hacienda “esta lista será solo un pequeño paso con efectos muy limitados en la lucha contra la evasión de impuestos corporativos y la injusta competencia fiscal”.

Según el secretario general de Gestha, José María Mollinedo, “para acabar con los paraísos fiscales lo primero sería detectar todos los que existen y los que se creen en el futuro”. Una vez localizados, “sería fundamental aumentar la presión internacional para acabar tanto con su opacidad como con sus privilegios tributarios”.

Por último, Gestha propuso una serie de medidas para combatir la proliferación de paraísos fiscales, entre las que destacan “la elaboración por expertos independientes de un análisis y evaluación oficial de la economía sumergida en España, del fraude fiscal y laboral y de la elusión fiscal”, un “control por las Cortes Generales de los resultados de la Agencia estatal Tributaria para garantizar una gestión transparente, neutral e independiente” y un control “exhaustivo” de las sociedades patrimoniales con el fin de “evitar la elusión del IRPF de socios y administradores”.