Esta manifestación tiene lugar después de que el pasado jueves la jueza de la Audiencia Nacional Carmen Lamela ordenara el encarcelamiento del exvicepresidente de la Generalitat de Cataluña Oriol Junqueras y ocho exconsejeros del Govern. Asimismo, hace tres semanas encarceló a los presidentes de la Asamblea Nacional Catalana (ANC), Jordi Sànchez, y de Ómnium Cultural, Jordi Cuixart.

Los organizadores de la manifestación sostienen que el actual es el “Estado del postfranquismo” y subrayan que quienes apoyaron la dictadura de Franco se encuentran “cada día más a gusto” con el “Régimen monárquico del 78”.

Denuncian que la Transición sirvió para “mantener todos los elementos esenciales” del franquismo y definen aquel periodo como la semilla de la “II Restauración Borbónica”.

También ponen en cuestión la independencia del Poder Judicial, incidiendo en que la Audiencia Nacional es un “tribunal de excepción sin parangón en Europa”, “heredero directo” del Tribunal de Orden Público franquista y “absolutamente dependiente del poder político” a través de la Fiscalía General del Estado.

A su vez, presentan a la jueza Lamela como una magistrada que tiene un “largo haber represivo en su trayectoria profesional”.

Al mismo tiempo, comentan que en España existe un “uso punitivo y político del Código Penal” con la “creatividad necesaria” en su interpretación para adaptarlo “de la forma más brutal jurídicamente y más burda intelectualmente a las necesidades represivas de la coyuntura”.

Por todo ello, aventuran la caída del “Régimen del 78” y el advenimiento de la “República” con las siguientes consignas: “presos políticos libertad”, “procesos constituyentes ya” y “abajo el régimen monárquico del 78”.