Los fiscales Miguel Ángel Carballo y Pedro Rubira han hecho esta solicitud atendiendo a la gravedad de los delitos que se atribuyen a los investigados -que en el caso del delito de rebelión está penado con hasta 30 años de cárcel-, a la reiteración delictiva y al riesgo de fuga de los acusados.

La no comparecencia este jueves de Puigdemont y de cuatro de sus exconsejeros podria repercutir de forma negativa en la adopción de medidas cautelares por parte de la magistrada Carmen Lamela, que podría interpretar la postura del expresidente catalán como un riesgo de fuga de Junqueras y el resto de exmiembros del Govern.

Lamela inició, pasadas las doce del mediodía, la celebración de una vistilla conjunta con todos los investigados para fijar las medidas cautelares una vez concluyeron todas sus declaraciones.

SÓLO VILA RESPONDE AL FISCAL

El exconseller de Economia de la Generalitat de Catalunya Santi Vila fue el único de los nueve miembros del Gobierno catalán que comparecieron esta jornada que respondió a la Fiscalía, mientras que el resto de los consejeros sólo han contestado a su defensa.

Vila, que dimitió antes de la declaración unilateral de independencia, contestó a todas la partes por espacio de 45 minutos, mientras que sus excompañeros de Gabinete únicamente respondieron a su abogado durante escasos cinco minutos.

Finalmente, han acudido este jueves a ocho consellers, mientras que el expresidente de la Generalitat y otros cuatro exmiembros del Govern permanecen en Bruselas. Los que han comparecido son Meritxell Borràs, Raul Romeva, Josep Rull, Jordi Turull, Carles Mundó, Dolors Bassa, Joaquim Forn y Meritxell Ruiz. En cambio los exconsjeros Lluis Puig, Clara Ponsatín, Toni Comín y Meritxell Serret continúan en Bélgica desobedeciendo la orden judicial.