Así lo aseguró Javier Melero, quien lleva la defensa de Lluís María Corominas, exvicepresidente primero de la Mesa y expresidente del grupo parlamentario de Junts Pel Sí (JxS) y Lluís Guinó, exvicepresidente primero de la Mesa y diputado de JxS.

Melero hizo declaraciones a los medios de comunicación tras la vista de esta mañana en el Supremo, en la que el juez Pablo Llarena aplazó las comparecencias hasta el próximo jueves a petición de los abogados. Además, a instancias de la Fiscalía, el instructor ordenó que se vigile a la presidenta del Parlament, Carme Forcadell, y a los exmiembros de la Mesa investigados por rebelión y otros delitos.

“El fiscal ha solicitado la menos invasiva de todas las medidas cautelares consistente en control de localización por vía de teléfono”, explicó este abogado, para añadir después que esta medida se acordó “porque hay personas que no han comparecido al llamamiento de la Justicia”, al referirse al expresident de la Generalitat.

Preguntado por la ausencia hoy de Puigdemont en la Audiencia, Melero dijo que “no ponerse a disposición de la Justicia cuando eres llamado siempre perjudica al resto de coimputados” y contestó con un rotundo “sí” a la pregunta de sí tendría que haber acudido a declarar.