Sin embargo, GM aseguró a través de un comunicado que el acuerdo estará sujeto a diversas condiciones de cierre. Entre ellas, ha señalado “los compromisos de financiación esperados con el apoyo y garantías del gobierno sueco, así como la ayuda a una transición desde GM, para que Saab se haga independiente”.

Por otra parte, explicó que “como parte de la transacción propuesta, GM y Saab seguirán compartiendo tecnología y servicios durante un período de tiempo definido. Esto será gestionado a través de licencias y acuerdos de servicio”.

LA POSTURA DE FORSTER

El presidente de GM Europa, Carl-Peter Forster, ha asegurado que “este contrato es un importante paso en el trayecto hacia un acuerdo definitivo”.

Asimismo, ha indicado que la compañía seguirá “trabajando con todas las partes para definir los detalles finales y asegurar un cierre rápido del acuerdo, que esperamos ocurra en los próximos meses. El cierre del acuerdo está sujeto al compromiso de financiación del Banco Europeo de Inversiones, garantizado por el gobierno sueco”.

Por su parte, el consejero delegado de Koenigsegg Group, Christian von Koenigsegg, ha señalado que “nuestro plan es transformar Saab en una compañía emprendedora independiente y hacerlo de forma sostenible convirtiéndola en rentable”.

El director general de Saab, Jan Åke Jonssson, ha destacado que el acuerdo “es un paso importante para asegurar empleos y nuestro futuro a largo plazo como fabricante de automóviles sueco. A corto plazo, nos permitirá avanzar con apasionantes nuevos coches empezando este mismo mes con el nuevo Saab 9-3X”.