Madrid. Más de 100 padres han acompañado desde marzo a sus hijos menores al quirófano en el Hospital General de Villalba

MADRID
SERVIMEDIA

Más de 100 padres han acompañado desde marzo a sus hijos menores al quirófano en el Hospital General de Villalba gracias a la puesta en marcha de un Plan de Humanización”, que tiene por objetivo disminuir la tensión emocional que supone para los niños quedarse en manos de los profesionales sanitarios antes de dirigirse al quirófano para someterse a una operación.

Desde su inicio, en marzo de este año, los más de 100 niños menores de 10 años que han tenido que pasar por quirófano han estado acompañados de sus padres, lo que “pone de manifiesto el éxito y la buena acogida de esta medida”.

Esta iniciativa se enmarca dentro del Plan de Humanización de la Asistencia Sanitaria impulsado por la Consejería de Sanidad de la Comunidad de Madrid, cuyo objetivo es promover actuaciones que garanticen un trato más cercano con el paciente a través de la personalización de la atención y a lo largo de todo el proceso asistencial.

Así, el acompañamiento al menor en el acceso al quirófano y mientras dure la inducción anestésica, con el objetivo de que el proceso resulte lo más confortable posible para él, “es una de las estrategias más efectivas, sin efectos secundarios ni riesgos”.

Aprovechando que la inducción anestésica pediátrica suele realizarse con gas (Sevoflurano), el padre o la madre colocan la mascarilla facial con los gases suministrados por el anestesista hasta el momento en el que el niño comienza a dormirse.

En ese instante, el progenitor es acompañado al exterior del quirófano hasta el área de espera de los familiares. Después, volverá a acompañar al niño durante su recuperación en Reanimación o bien, si la operación se prevé de muy corta duración, al box donde se desarrollará el postoperatorio.

(SERVIMEDIA)
28 Oct 2017
DSB/man