Lo hizo a la salida de la sesión de la comisión del Senado constituida para tramitar el acuerdo del Consejo de Ministros para aplicar el 155, que aprobó elevarlo al Pleno de mañana con los votos del PP, PSOE y UPN.

Cleríes insistió en su tesis de que el Ejecutivo ya tenía “decidida” esa aplicación, y “sólo le faltaba la complicidad del PSOE”, que ha logrado a través de esa enmienda que insta a modular y graduar las medidas en función de las circunstancias y cambios en la situación, e incluso anticipar su cese.

Por lo demás, Cleríes criticó, como en la comisión, que no se permitiera defender la posición de la Generalitat a su delegado en Madrid, Ferran Mascarell, puesto que, en el requerimiento que envió el Gobierno central, se le pedía al presidente catalán, Carles Puigdemont, que nombrara a un representante, y “en ningún caso hablaba de un rango” como que tuviera que formar parte de su Gobierno, razón alegada para no admitir a Mascarell. El trato a éste demuestra, a su juicio, que “no se trata bien a Cataluña” y que el PP “no tenía ningún interés en escuchar a Puigdemont”.