Cataluña. Los nacionalistas critican las medidas del 155 como un ataque a Cataluña

MADRID
SERVIMEDIA

El PDeCat, ERC y el PNV criticaron este jueves en el Senado la aplicación del artículo 155 de la Constitución en Cataluña, al interpretar que se trata de “un golpe de Estado”, “una ofensiva contra el catalanismo” y "una violación de los derechos fundamentales de los catalanes”, respectivamente.

Los tres grupos ejercieron, junto a Unidos Podemos, el turno en contra a las medidas de aplicación del artículo 155 de la Constitución, en la comisión formada para ello en el Senado. El portavoz del PdeCat, Josep Lluís Cleries, lamentó que este es un día "histórico en la tristeza" y dijo que “mejor que no haya venido” el presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, a juzgar por el trato dado a su delegado en Madrid, Ferran Mascarell, a quien no se le dejó intervenir para argumentar su rechazo al 155.

Cleries denunció que con el acuerdo del Consejo de Ministros que se tramita en el Senado “se eliminan los fundamentos de toda autonomía para Cataluña”, y preguntó si el “dar instrucciones” al Gobierno autonómico afectado por el 155 al que se refiere la Carta Magna “es decapitar al Gobierno de la Generalitat” y “usurparle la competencia de convocar elecciones”.

En suma, dedujo que lo que se va a aplicar es “un golpe de Estado del nacionalismo español, del PP, PSOE y CS contra las instituciones democráticas de Cataluña”, elegidas en los comicios de 2015. Aseguró que con esta aplicación tan dura del 155 se impone “lo que les viene bien” y se sitúan fuera del Estado de Derecho, porque un estatuto de autonomía se ha de modificar de acuerdo con sus propias normas.

El portavoz del PdeCAt terminó pidiendo la libertad para los “presos políticos” Jordi Sànchez y Jordi Cuixart, presidentes de la Asamblea Nacional Catalana y de Ómnium Cultural.

Desde ERC, Josep Estradé proclamó desde el principio que su partido “será siempre fiel al mandato del pueblo de Cataluña”, y éste, a falta de otro, deriva de las elecciones de 2015 y el referéndum del 1 de octubre, y es “un mandato muy claro” por la independencia de una “nación” que lo es “porque se siente nación” y no hace falta que nadie se lo reconozca.

Además, criticó la aplicación del 155 como “una auténtica ofensiva contra el catalanismo”, que va “mucho más allá” del combate contra el independentismo, y como un supuesto intento del PP, PSOE y Ciudadanos de “sembrar la confusión y el caos” para “imponerse” en Cataluña pese a ser minoría.

En nombre del PNV, su portavoz, Jokin Bildarratz, comenzó diciendo que “mientras hay vida, hay esperanza”, y pidiendo al Gobierno que se centre en una búsqueda de acuerdo y no en aplicar el 155 para que los esfuerzos que “hemos hecho todos” (se ha publicado que el lehendakari, Íñigo Urkullu, ha intentado mediar para impedir la declaración de independencai de Cataluña) vean la luz y fructifiquen”.

Bildarratz cuestionó el fondo de la aplicación del 155 señalando que para los catalanes el cese de su presidente tiene “un significado especial”, y que no entender eso y que Cataluña, como Euskadi, no es sólo una comunidad autónoma sino un pueblo, “es desconocer por dónde puede ir una solución”.

En su opinión, el presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, no declaró la independencia, y el Gobierno no le envió un requerimiento, sino que le obligó a responder sí o no a una pregunta para aplicar su decisión previa de aplicar el 155.

Además, dijo que destituirle a él y a sus consejeros “va en contra de los derechos fundamentales” de los catalanes, que eligieron a un Parlamento que escogió a Puigdemont. Subrayó que intervenir una autonomía va en contra de la Constitución y afeó a los constitucionalistas: “Les han quitado todo, han suprimido la autonomía de la primera a la última letra”.

(SERVIMEDIA)
26 Oct 2017
KRT/caa