Estos datos fueron facilitados hoy por el delegado del Gobierno en Madrid, Constantino Méndez, tras la segunda reunión celebrada por el Consejo Regional de Seguridad, que abordó exclusivamente el tema de las bandas juveniles violentas y que se ha marcado como objetivo "erradicar de raíz" las bandas latinas en la región.

A la reunión de este Consejo, que integra a las fuerzas y cuerpos de seguridad, instituciones, colectivos y asociaciones con responsabilidad en materia de seguridad, asistieron, además de Méndez, responsables de las fuerzas y cuerpos de seguridad, el Defensor del Menor, Pedro Núñez Morgades; el concejal de Seguridad del Ayuntamiento de Madrid, Pedro Calvo, y el presidente del Movimiento contra la Intolerancia, Estéban Ibarra, entre otros, así como representantes de sindicatos, empresarios, asociaciones de vecinos y otras organizaciones.

Para acabar con las bandas latinas, se han intercambiado información entre todos y han acordado que, en unos diez días, cada uno concretará, en relación con sus competencias, las acciones o programas que puede intensificar o poner en marcha para volver a reunirse dentro de unos quince días "como grupo de trabajo" y elaborar, con todas las propuestas, un programa de acción conjunto.

Según Méndez, "todos estamos de acuerdo en que tenemos que trabajar desde la efectividad policial, desde la investigación judicial para la desarticulación de los grupos y la puesta a disposición de sus miembros, y desde la perspectiva social, analizando las causas que llevan a esos comportamientos violentos de los jóvenes".

Méndez explicó que el problema de las bandas latinas existe, tiene causas profundas y "cabe, podemos, tenemos y queremos intervenir frente al mismo" en todos los ámbitos, en el policial, judicial y social. "Recuerden que estamos casi siempre delante de menores, y entendemos que un menor exige de nuestra sociedad una tutela específica", señaló.

Por ello, el delegado del Gobierno dijo que los esfuerzos para acabar con estas bandas se conducirán fundamentalmente contra quienes inducen, dirigen y protegen su acción, es decir, contra sus cabecillas, que dijo que en la mayoría de los casos tienen la mayoría de edad penal.

Explicó que, según los informes presentados por las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, en la Comunidad de Madrid hay "perfectamente identificadas" 753 personas que son miembros de las bandas latinas de la región, a los que hay que sumar otras 704 que se relacionan con estos grupos en un grado de pertenencia que todavía está siendo objeto de investigación.

La mayoría de estos integrantes identificados pertenecen a los "Latin King" y los "Ñetas", un total de 352 y 250 personas, respectivamente, siendo la "Dominican Dont Play" la tercera banda más importante en Madrid, con 65 miembros, y los "Latinos de fuego" la cuarta, con 63 identificados, mientras que los 20 restantes se reparten entre otras bandas.

Méndez explicó que la mayoría de estos integrantes de las bandas latinas son menores y "cada vez más, porque el reclutamiento y la captación en el tema de bandas latinas se está realizando sobre edades cada vez más tempranas".

Según los datos de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, las bandas latinas cometieron en lo que va de año 24 delitos penales, frente a 23 en todo el 2004, de los que uno fue un homicidio, 17 lesiones, cuatro robos con violencia e intimidación y dos amenazas. Del total de estos delitos, el 84% fueron esclarecidos (21) y se produjeron 43 detenciones (65 en todo el 2004).

Estos datos no incluyen las muertes o delitos de menoresque pueden pertenecer a grupos violentos, pero que son delitos que no han sido cometidos, explicó Méndez, en el horizonte de las bandas latinas. Aclaró que estos datos tienen que ver estrictamente con comportamientos grupales de las bandas latinas, con delitos cometidos por sus miembros en el sistema de acción que esas bandas tienen frente a otras bandas o frente a miembros de otras bandas.

MAS EFECTIVOS

Méndez anunció que se duplicarán los efectivos del grupo especial de información sobre bandas latinas existente dentro de la Jefatura Superior de Policía de Madrid y que se creará un grupo nuevo similar en la Guardia Civil. Discrepó con el vicepresidente y consejero de Justicia e Interior de la Comunidad de Madrid, Alfredo Prada, de que los efectivos policiales para la región hayan descendido desde la llegada del PSOE al Gobierno de la Nación.

No obstante, insistió en que la lucha contra las bandas latinas no es un trabajo sólo de la policía, de la que dijo que su labor preventiva de investigación e identificación de los miembros de las bandas es "excelente", sino "un trabajo que va a la raíz, a las causas sociales del problema". Por ello, el delegado del Gobierno dijo que, aunque habrá más presencia policial, esto no es ahora mismo lo más urgente.

Reconoció que las bandas latinas son "un fenómeno emergente cada vez más visible" en Madrid, si bien aseguró que el impacto violento de los grupos neonazis en 2004 fue "bastante superior todavía al de las bandas latinas". Explicó que la actividad policial contra grupos neonazis ha sido el pasado año francamente alta y que "ahora el escenario nos indica que tenemos que intensificar la acción ya sobre bandas latinas".

MULTAS POR LLEVAR NAVAJAS

Por su parte, el defensor del Menor mostró su deseo de que el Consejo Regional de Seguridad se convierta en "una mesa del menor" para tratar adecuadamente la violencia y el delito del colectivo y reclamó un "pacto" para que cada vez que haya un asunto relacionado con menores "no tirarnos la responsabilidad como arma arrojadiza los unos a los otros".

Anunció que propondrá dentro de esa actuación conjunta de todo el Consejo Regional de Seguridad que se controle en las escuelas y en las calles las navajas, y afirmó que están estudiando que los padres paguen las sanciones por las infracciones que sus hijos cometan, algo que ahora sólo ocurre en la "ley del botellón".

"Si a un menor se le pilla por la calle con una navaja, que los padres tengan que pagar esa multa de aproximadamente unas 50.000 pesetas (300 euros)", defendió Núñez Morgades. También pidió que la fiscalía estudie cómo aplicar a estas bandas el delito de asociación ilícita y las normas de extranjería a los cabecillas que sean mayores de edad.

Núñez Morgades también propondrá que haya mucho más contacto y que se invite a participar a la sociedad inmigrante, si es necesario con reuniones los sábados y domingos, para que no se siga ahondando en la fractura que hay entre la sociedad inmigrante y la autóctona, y para que no aumente la xenofobia.

Tanto el defensor del Pueblo como Pedro Calvo, concejal de Seguridad, y Esteban Ibarra, del Movimiento contra la Intolerancia, consideraron positivo el encuentro de hoy y felicitaron al delegado del Gobierno por esta iniciativa de reunir a todos los colectivos afectados y que tienen responsabilidad en el tema de las bandas urbanas, además de mostrarse optimistas acerca de que se dará respuesta a este problema de las bandas latinas.