En un informe sobre la movilidad empresarial derivada del contexto político en Cataluña, la patronal regional señala que la urgencia en la adopción de medidas “ha sido más intensa en aquellas que cotizan en los mercados de capitales”, puesto que se está anticipando al mercado esta eventualidad con un descenso en sus cotizaciones, “y de forma más intensa en el sector bancario”.

Foment indica que el porcentaje de grandes empresas en España es relativamente bajo en comparación con otras economías en Europa.

Concretamente, el 27% de los trabajadores del sector privado en España está ocupado en grandes empresas (de 250 o más trabajadores), mientras que en Alemania y Francia su peso alcanza el 37%.

Si se suman las medianas empresas, que son aquellas que cuentan con entre 50 y 249 trabajadores, el porcentaje para España se amplía al 40% del total de trabajadores, cifra que se sitúa por debajo del registro en las economías de referencia.

La patronal catalana destaca que “este es el tipo de empresas que podrían contemplar mayoritariamente decisiones de traslado de sus bajo un escenario de incertidumbre derivado de este nuevo contexto político en Cataluña”.

Añade que los riesgos son “más relevantes en el medio plazo en la medida en que se pueda ver limitado el desarrollo de ciertos planes de inversión si el entorno de incertidumbre jurídica permanece”.

Si este fuera el escenario, Foment advierte de que la actividad empresarial podría verse afectada con impactos negativos sobre la inversión y el empleo.

Por ello, reclama que “la vía de agua abierta en la economía catalana debe cerrarse de forma rápida, con la participación con altura de miras de los agentes políticos implicados”, a fin continuar con el crecimiento económico en la economía española y catalana.