Así lo dijo el ministro de Asuntos Exteriores y de Cooperación, Alfonso Dastis, durante la sesión de control al Gobierno en el Congreso de los Diputados, en la que explicó las prioridades de España en el Consejo de Derechos Humanos de la ONU para el periodo de 2018-2020.

El pasado 16 de octubre España fue elegida miembro de este organismo para el periodo 2018-2020 dentro del grupo ‘Europa Occidental y otros’ con el apoyo de 180 votos.

El jefe de la diplomacia destacó que este resultado es “realmente revelador” del apoyo concitado por la candidatura española, que logró superar a países con un “excelente registro” en cuestiones de derechos humanos, como Australia.

Dastis subrayó que la protección de los derechos humanos es una “prioridad” para el Gobierno, tal y como se puso de manifiesto durante su estancia como miembro no permanente en el Consejo de Seguridad de la ONU entre 2015 y 2016.

Por ello, afirmó que “aumentar la efectividad” del Consejo de Derechos Humanos de la ONU será uno de los objetivos del Gobierno durante su estancia en el mismo.

Al mismo tiempo, explicó que la abolición de la pena de muerte, la protección de las cuestiones de género, de las minorías sexuales, de las personas con discapacidad, la promoción del agua potable y del saneamiento y el apoyo a los defensores de los derechos humanos serán los ejes de acción del Ejecutivo en este organismo.