Así consta en el último informe "Situación España" presentado este lunes en rueda de prensa, en el que se apunta además que la reducción del déficit público será menor de la prevista por el Ejecutivo.

Se prevé que el saldo negativo de las cuentas públicas del conjunto de las administraciones sea del 9,6% en 2010 y del 6,6% en 2011. El Gobierno estima un 9,3% y un 6% de déficit para este año y el siguiente.

En cuanto a la tasa de paro, BBVA afirma que ésta alcanzará el 19,4% en 2010 y el 19,2% en 2011.

Para el conjunto de Europa, el banco señala que la economía crecerá un 0,7% en 2010 y un 1,3% en 2010. España será la única de las grandes economías europeas que seguirá cayendo este año. Por ejemplo, Alemania crecerá un 0,4%, Francia lo hará un 0,6%, Italia un 0,6% y Reino Unido un 0,8%.

Desde el Servicio de Estudios del BBVA subrayaron que en el corto plazo se mantienen "importantes incertidumbres", que vienen derivadas de la debilidad de la recuperación de la economía europea, la tensión en los mercados financieros y los efectos del ajuste del fiscal. Sobre este último aspecto, indicaron que las medidas tendrán un impacto "muy limitado" en el crecimiento.

BBVA cree que la economía española crecerá dos décimas en el segundo trimestre del año, aunque en la segunda parte del ejercicio registrará "algún decrecimiento, que no puede ser de otra forma en el contexto de las medidas que se han ido tomando".

Para registrar un crecimiento que sea creador de empleo, habrá que esperar hasta finales de 2011, aunque la intensidad de la recuperación dependerá "de la intensidad y el alcance de las reformas estructurales".

Además, España podría llegar a crecer un 3% en 2013 si se llevan a cabo las reformas estructurales "de calado y ambiciosas" que necesita la economía.

CONSOLIDACIÓN FISCAL

Para el economista jefe del Grupo BBVA, José Luis Escrivá, el proceso de consolidación fiscal impulsado por el Gobierno es "absolutamente necesario e ineludible", para agregar que "aumenta la credibilidad de la economía española".

Además, según explicó el de España y Europa, Rafael Doménech, el ajuste fiscal "va en la dirección correcta, está bien encaminado", y apuntó que "si se cumple con rigurosidad puede ser factible".

En este sentido, subrayó que el consumo privado "ya ha hecho lo que tenía que hacer", mientras que el sector público "ha iniciado ahora" el ajuste que debe hacer tras las políticas expansivas adoptadas en los últimos años.

Doménech comentó que la economía española se enfrenta a tres retos importantes. La reducción del déficit, que ya se ha puesto en marcha, y dos aún "pendientes": la reforma laboral y la reestructuración del sistema financiero, que exigen "decisión y cierta valentía".

Sobre la subida de impuestos a las rentas altas, desde BBVA subrayaron que en España "ya hay impuestos progresivos; repasen la progresividad del IRPF, que es uno de los impuestos más progresivos que hay en los países de la UE".

Por otra parte, Escrivá descartó que "haya un ataque especulativo al euros", para indicar que la moneda única estaba sobrevalorada, y en una evolución "tampoco muy rápida" va "hacia niveles sostenibles a medio plazo".