Así lo explicó Sáez de Santamaría en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, donde apuntó que dicho análisis se ha llevado a cabo al revisar el plan presupuestario 2018 que debe remitir el Ejecutivo a la Comisión Europea antes del 15 de octubre.

A este respecto, lamentó que “2018 debía ser un buen año para el crecimiento y el empleo, pero los acontecimientos que estamos viviendo en Cataluña nos hacen ser más prudentes”.

En esta línea, recordó que las agencias de calificación han alertado de que la inestabilidad política puede perjudicar la economía catalana y que de continuar con la salida de empresas eso podría acabar provocando una recesión en Cataluña.

Dicha recesión, según la vicepresidenta del Gobierno, “indudablemente” tendría impacto en la evolución del PIB en el conjunto del país.

Por ello, afirmó que “los acontecimientos en Cataluña están poniendo en riesgo la recuperación económica en esa comunidad autónoma y, por tanto, su creación de empleo”.

Como ejemplo, se refirió a los datos de inversión del segundo trimestre, en los que se produjo “un parón”. En concreto, indicó que en Cataluña bajó un 10% mientras en el conjunto del país subió un 13%.

Por otro lado, Sáenz de Santamaría lamentó que se ha producido “una caída dramática del turismo” ya que entre el 20% y el 30% de las reservas hoteleras en Barcelona se han visto afectadas.

Por último, dijo a la Generalitat, en referencia al requerimiento que debe contestar, que “todavía está a tiempo” de recuperar la normalidad, la convivencia y la estabilidad económica.