Con ello, la cantidad total que la UE ha canalizado a través de la FAO alcanza los 228 millones de euros, una cifra sin precedentes, según aseguró hoy esta agencia de la ONU.

"Resulta inaceptable que una de cada seis personas en el planeta sufra desnutrición", aseguró José Maria Sumpsi, quien señaló que los precios de los alimentos en los países pobres siguen siendo altos, lo que afecta de forma negativa al acceso de la población vulnerable a los alimentos.

La UE invertirá 7,5 millones de euros adicionales en Bangladesh para mejorar la seguridad alimentaria de más de 80.000 campesinos, ganaderos y pescadores, que recibirán formación e insumos de producción, como maquinaria agrícola, semillas y fertilizantes, equipos y apoyo para el riego, pequeños y grandes rumiantes, aves de corral, piensos y aparejos de pesca.

Otros tres millones de euros servirán para duplicar los proyectos financiados por la FAO en Níger, país gravemente afectado por una sequía que ha diezmado las cosechas en la región del Sahel. La principal prioridad es reducir la desnutrición de 72.000 familias campesinas (cerca de 500.000 personas) incrementando su producción agrícola.

Por último, otros 2,7 millones de euros se destinarán al Programa mundial de erradicación de la peste bovina (PMEPB), como ampliación de la ayuda que desde hace años ofrece la UE para eliminar esta enfermedad, responsable de hambrunas desde hace siglos en Asia, África y Europa.